Barcelona: Acortar las distancias

Jordi Hereu i Boher, consultor del Banco Interamericano de Desarrollo para asuntos de ciudades intermedias y exalcalde de la ciudad de Barcelona, España, en el período 2006-2011, quien se autodenomina un enamorado de las ciudades, asegura que el desarrollo de un territorio no es automático sino que se tiene que construir colectivamente.

 Hereu i Boher participó en el Encuentro Nacional de Empresarios (Enade) 2016 y expuso la necesidad de acortar las distancias entre las ciudades para crear polos de desarrollo.

Asegura que son “un ser complejo y por eso son fascinantes” y se deben construir pensando en todas las disciplinas del saber.

Tener rumbo

El exalcalde comparó la administración de las ciudades como las de una empresa. “Es muy diferente una empresa que sabe dónde va porque sabe sus proyectos que otra que no. Apliquen esto mismo a un producto cultural de la humanidad que se llama ciudad”.

Agregó que una parte fundamental de todo proyecto pasa necesariamente por empoderar a los habitantes de las ciudades. “Cuando hay compromiso y la ciudadanía se siente parte de su  ciudad genera pactos y consensos básicos a través del cual le exige a la política desarrollar y liderar esos proyectos”, agregó.

El consultor aseguró que estos pactos implican planificar y saber lo que se quiere hacer con una visión. “Les pongo un ejemplo de mi ciudad, que no es mejor ni peor que cualquier otra, sino una experiencia de transformación con sus errores y aciertos”, aseveró Hereu i Boher, quien describió que Barcelona, en sus inicios, desarrollo un tren que luego se convirtió en un muro para unir la ciudad pues de alguna manera cortaba el ingreso al mar que era su potencial económico.

“¿Qué se hizo? abrimos la ciudad al mar, la integramos al puerto y apostamos de manera clara, con educación y cultura como elemento básico, y se logró posicionarla de una ciudad  industrial a una global”, aseguró.

Movilidad

El exalcalde afirmó que la movilidad expresa cómo es una ciudad y esta no puede existir si no hay urbanismo.

“No podrán tener movilidad si la estructura urbana es pésima. Esto es un gran reto en Latinoamérica, como ha sido mala se tiene que intentar solucionar la movilidad como se puede”, aseguró el experto, quien agregó que para la planificación es vital que el alcalde no esté solo.

Otro reto a superar es la reconquista del espacio público que necesariamente pasa por generar ciudadanía en la población. “Barcelona no se hubiera podido hacer más accesible y tener más movilidad sino se hubiera cambiado el modelo que se traía”, refirió y añadió: “Guatemala es un país con menos urbanización que el promedio continental, pero tiene la gran oportunidad de desarrollar ciudades intermedias, es un momento histórico, deben aprender de nuestros errores y convertir sus ciudades en una gran oportunidad”, puntualizó.

Medellín: Comprender la desigualdad

Uno de los expositores invitados para Enade 2016, cuyo tema central fue el desarrollo de las ciudades intermedias, fue Sergio Fajardo, exalcalde de Medellín y exgobernador de Antioquía, Colombia,  quien compartió su experiencia en la administración pública y aseguró que uno de los secretos para fomentar el desarrollo de las ciudades es comprender que la desigualdad impide que las políticas públicas lleguen de forma uniforme a todas las personas, razón por la cual se debe abordar de forma seria el problema desde la función pública.

“Hay que comprender una cosa, son los políticos los que toman las decisiones más importante de la sociedad, nos guste o no. A nosotros no nos gustaba, pero tomamos una decisión: organizarnos para llegar al poder y transformar la sociedad,  y 17 años después doy testimonio de que las cosas se pueden hacer”, fueron las palabras introductorias del exalcalde.

Fórmula

Fajardo, quien es matemático, aseguró que utilizó una fórmula para promover el desarrollo en la ciudad que dirigió. “Nos planteamos los problemas que queremos resolver. Trabajamos sobre tres de las desigualdades profundas entre territorios, la violencia y la cultura de la ilegalidad que tiene como capítulo estelar la corrupción y desde ahí proponemos una solución, Medellín y Antioquia la más educada”, dijo.

El experto explicó que esos tres problemas muchas veces parecen muy distintos entre sí, pero cuando se ve hacía abajo y se miran las raíces del problema se descubre que después de tantos años tienen los mismos orígenes y si se van a combatir, se tienen que atacar de forma uniforme.

“En Colombia, y sospecho que también pasa en Guatemala, cuando salen de la casa y se sientan en la esquina muchos jóvenes miran un muro gigantesco, que son las desigualdades, saben que atrás de ese muro están las oportunidades. Al lado hay una puerta, que es la entrada a la ilegalidad y para muchos seguir por ella es una probabilidad muy alta”, aseguró el exgobernador.

Educación

 Fajardo afirmó que es vital estrechar esa puerta para que las personas desistan de utilizarla. “Para ello tenemos que romper el muro y abrir puertas reales, para que las personas tengan esperanza y es lo que venimos construyendo”, aseguró, y  precisó que cualquier persona que pase por esas puertas tiene que tener un equipaje fundamental llamado educación.

“Sin educación no hay libertad. Muchas veces no se hace énfasis en la importancia de la educación para hacer una transformación”, agregó el experto, quien afirmó que hay que fundamentar valores y dignidad humana.

“Cada persona es igual, eso se dice muy fácil, pero asumirla dentro de una política es crucial”, aseguró  y aseveró que es vital comprender que el fin justifica los medios y con base en eso debe construirse confianza en las personas para salir adelante.