Estas medidas se toman luego de que el Ministerio de Salud anunciara que un niño de 9 años murió el pasado miércoles a causa de un cuadro de rabia bovina que al parecer le fue transmitida por la mordedura de una ardilla en la comunidad de Palmar Norte (sur).
“Se recomienda evitar el contacto de animales domésticos y no manipular innecesariamente los animales silvestres como ardillas, mapaches, monos y zorros, además vacunar los perros y gatos cada año y reportar de inmediato cualquier caso sospechoso al Senasa“, expresó en el boletín su subdirector, Alexis Sandí.
Las autoridades también capturan vampiros para bajar la población existente de este mamífero volador, debido a que es el vector de mayor importancia para la transmisión de esta enfermedad.