“Se confirma la violación de ambas chicas. Murieron asfixiadas“, dijo el superintendente de la policía de Budaun, Atul Saxena, quien anunció la detención de cinco hombres.

Tres están acusados de la violación, mientras que dos policías se enfrentan a cargos de connivencia con los criminales y negligencia en sus funciones. Los familiares de las víctimas dieron el nombre de otros dos hombres, pero la policía desconoce su paradero, añadió Saxena.

Los familiares de las dos primas, de la casta de los intocables o dalits, dijeron que la Policía podría haber “salvado” a las adolescentes, pero que se negaron a hacerlo ya que las chicas eran de una casta inferior.

Los presuntos agresores también eran de una casta superior. Las pruebas médicas mostraron que las víctimas habían sido agredidas sexualmente en varias ocasiones.

El caso pone de nuevo en evidencia la dificultad de prevenir la violencia sexual en India pese al endurecimiento de la ley y a los esfuerzos para tratar de cambiar el comportamiento contra las mujeres después de la violación colectiva y la muerte de una estudiante en Nueva Delhi a finales de 2012 que impactó a India y al mundo.