El jefe de gobierno exigió de nuevo a la Autoridad Palestina, presidida por Mahmud Abas, “de cuyo territorio provenían los secuestradores, que haga todo lo necesario para ayudar a los rehenes a volver a casa sanos y salvos”.

En respuesta a unas declaraciones similares, el portavoz de los servicios de seguridad palestinos, el general Adnan al Damiri, había calificado el viernes de “insensatas” las acusaciones de Netanyahu especificando que ellos no tienen “ningún poder” en la zona donde desaparecieron los jóvenes, que esta bajo control civil y militar israelí.

Según la prensa israelí, los adolescentes, estudiantes de escuelas talmúdicas, desaparecieron el jueves por la noche cuando hacían autoestop cerca de Gush Etzion, una colonia situada entre las ciudades palestinas de Belén y de Hebrón (sur de Cisjordania), para ir a Jerusalén.

Los desaparecidos fueron identificados como Eyal Yifrach, de 19 años, originario de Elad (Israel); Naftali Frenkel (16 años) de Nof Ayalon (Israel); y Gilad Shaer (16 años) de la colonia Talmon, en la Cisjordania ocupada.

Uno de ellos sería de nacionalidad estadounidense, según la radio israelí.

Netanyahu reiteró además que el gobierno israelí considera responsables a la Autoridad Palestina y a Abas de todos “los ataques contra Israel” desde Cisjordania y la franja de Gaza.

“La alianza entre Abu Mazen (Mahmud Abas) y (el movimiento islamista) Hamas abre la puerta a Hamas al control de la Autoridad Palestina” en Cisjordania, añadió el primer ministro.

Netanyahu no cesa de denunciar el gobierno de unidad palestino acordado el 12 de abril entre la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y el movimiento islamista Hamas, considerado por Israel como una “organización terrorista”.

Dos mil soldados movilizados

La oposición laborista acusó al primer ministro de querer “explotar cínicamente la crisis (de los secuestros) con fines políticos”.

Netanyahu, que reunió a su gabinete de seguridad, aseguró haber ordenado al ejército y a los servicios de seguridad utilizar todos los medios para encontrar a los jóvenes “secuestrados” y para impedir que sean trasladados a la franja de Gaza o a otros sitios.

En el terreno, un responsable militar indicó el despliegue en la región de Hebrón de “importantes refuerzos”, en especial, de unidades de las fuerzas especiales y una brigada de paracaidistas. Los medios de comunicación hablan en total de 2.000 efectivos.

El mando militar dijo que la búsqueda se está desarrollando con la colaboración de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina, y precisó que “decenas de palestinos” han sido detenidos en el curso de la investigación.

El ministro de Defensa, Moshe Yaalon, acudió a Hebrón para supervisar la operación y confirmó que el ejército estaba buscando principalmente en esa zona.

“Los secuestros como tal no son nuevos. El año pasado conseguimos evitar una treintena de intentos (de secuestro) y otros 14 desde principios de este año. Pero en este caso no lo hemos conseguido”, admitió el ministro de Defensa.

Según el Club de Prisioneros Palestinos en Ramala, las autoridades israelíes anularon las visitas de las familias de los detenidos procedentes de la región de Hebrón.

En un comunicado publicado en internet y cuya autenticidad no ha podido verificarse, el grupo “Estado Islámico en Irak y el Levante -rama Palestina-Cisjordania” reivindicó el secuestro.

El EIIL es un grupo yihadista presente en Siria, que esta semana lanzó una fulgurante ofensiva en el norte de Irak, donde ha tomado numerosos territorios.

El último secuestro de un ciudadano israelí se remonta a 2006, cuando el soldado Gilad Shalit fue capturado y llevado a Gaza, donde el movimiento islamista Hamas lo tuvo preso más de cinco años. Finalmente fue liberado en 2011, a cambio de 1.027 prisioneros palestinos.