Guatemala

Tentación electoral por recursos del Estado

Representantes de diferentes sectores de la sociedad coinciden en que el mayor reto del Gobierno para el próximo año será no desviar recursos del Estado para gastos de campaña electoral  y reducir la corrupción que, según su percepción, ha prevalecido en los últimos tres años.

Expertos demandan que el Gobierno demuestre mayor transparencia en el gasto público y la asignación de obras.

Expertos demandan que el Gobierno demuestre mayor transparencia en el gasto público y la asignación de obras.

Jonathan Menkos, director del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, recomendó ejecutar los recursos del Estado de la manera más técnica posible. “Es complicado, porque   el presupuesto de gastos se aprobó sin normas de transparencia, pero por el bien del país se debe actuar sin opacidad”, dijo.

Fernando Urquizú, catedrático de la Universidad de San Carlos, afirmó que uno de los mayores retos es reducir la burocracia, porque ello reduce la opacidad. “Se tiene que trabajar con sentido de identidad”, manifestó.

El diputado Flavio Yojcom, presidente de la Comisión  de Ambiente, expresó: “Espero que en estos tres años hayan aprendido la lección sobre políticas públicas y tomen las cosas con seriedad, y no con interés personal”.

Édgar Gutiérrez, director del Instituto de Análisis e Investigación de los Problemas Nacionales, dijo: “Una de las mayores recomendaciones es que el Ejecutivo pueda asumir una actitud neutral en la dirección del Estado en un año electoral y que no desvíe fondos para sus candidatos”.

Retos específicos

Ana María Hernández, experta en Pedagogía  de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, consideró que en educación “el mayor reto será garantizar la calidad de los programas  dirigidos a los niños y jóvenes, y que en enero los escolares tengan útiles desde el primer día de clases”.

Juan Luis Carbajal, de la Pastoral de  Movilidad Humana, indicó que uno de los mayores retos “es dejar de ver a los migrantes con cara de remesas familiares para verlos como una población que fue  obligada a  irse  por  falta de oportunidad”.

Para el ex viceministro de Desarrollo Social, Luis Hernández, uno de los desafíos es que la cartera que representó “cumpla con la institucionalización de  los programas sociales, la verificación de la temporalidad,  mejorar la calidad de vida de los receptores y que no sean solo un proyecto asistencialista, porque por eso son transferencias condicionadas”.

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