Revista D

Espejo de Santa Rosa

La laguna de Ayarza, por su forma, también es conocida como El Tecomate.

Laguna de Ayarza (Foto Prensa Libre: Oswaldo Cardona)

Laguna de Ayarza (Foto Prensa Libre: Oswaldo Cardona)

Rodeada de peñascos e improvisados miradores, y a poco más de 100 kilómetros de la capital se encuentra uno de los depósitos naturales de agua más atractivos del país: la laguna de Ayarza. Sus aguas son tan claras y azules que se le conoce con el nombre de Espejo de Santa Rosa, debido a que en su superficie se refleja el cielo.

Es uno de los pocos lugares donde aún se puede pescar gracias a la limpieza de sus aguas. Los vecinos acostumbran lanzar sus anzuelos y con las especies que extraen cocinan un delicioso caldo en la orilla de la laguna.

Una de sus peculiaridades es que carece de playas debido a que su profundidad en la orilla es de 2.5 metros, lo que la convierte en el lugar apropiado para llevar a cabo un tour en lancha y así recorrer lo más recóndito de su superficie.

La laguna se encuentra ubicada a 108 kilómetros de la capital, entre los municipios de Casillas y San Rafael Las Flores, Santa Rosa. Es un sitio poco visitado por los turistas debido a que, según los vecinos, es poco promocionado por el Instituto Guatemalteco de Turismo y las autoridades municipales del departamento.

La caldera está formada por dos cuencas unidas y circuladas por paredes rocosas. Su extensión es de 14 km cuadrados y está ubicada a mil 409 metros sobre el nivel del mar.

Manto limpio

Arturo Ruano presidente del Comité Comunitario de Desarrollo (Cocode) de la laguna cuenta que se esfuerzan por mantener limpio el lugar debido a que “las pocas personas que la visitan los fines de semana y en los días de asueto dejan tirada la basura. “Pero gracias a Dios es un área que aún no está contaminada”, expresa.

El presidente del Cocode dice que para mantener limpio el lugar las autoridades municipales los apoyan enviando una vez al año brigadas de buzos para extraer la basura que cae al fondo de la laguna.

Julio García Palacios, residente del lugar, confirma la limpieza del lugar. “Esta laguna aún no está contaminada, sus aguas son muy claritas, es una de las mejores que tiene Guatemala”, expresa con orgullo.

En la actualidad, expresa Ruano, el número de turistas se ha reducido un poco más debido a que una cooperativa cobra Q.20 por el ingreso. “Ellos dicen que están autorizados para cobrar, pero pareciera que se quieren adueñar del área”, lamenta.

¿Cómo llegar?

De preferencia se aconseja viajar en un vehículo de doble tracción. El recorrido, desde la capital, se debe iniciar por la carretera C.A. 1 Ruta a El Salvador. Al llegar al kilómetro 54, jurisdicción de Barberena, rumbo a Nueva Santa Rosa, se debe cruzar a la izquierda hasta llegar a Casillas.

En este lugar se deben recorrer, aproximadamente, 33 kilómetros en camino de terracería hasta llegar a Tapalapa. A partir de aquí se debe avanzar una hora más hasta El Mirador, donde la mayoría de visitantes se detiene para observar la laguna, que desde este lugar se le ve forma de tecomate.

Enseguida, se debe principiar a descender, y pocos metros antes de llegar al casco de la aldea Ayarza se debe virar a la izquierda. Un kilómetro después ya se puede principiar a disfrutar de las aguas cristalinas de la laguna. Debido a que no se encuentra señalizado el ingreso, lo mejor es preguntar a cualquier vecino, quien con mucho gusto le explicará.

ESCRITO POR: