Más allá de un baño regular, hay hábitos que mantienen limpios a perros y gatos, como el cepillado de dientes, la limpieza de oídos, el corte de uñas y una alimentación adecuada, entre otros.
Lenin Paredes, veterinario de Arca de Noé, aconseja prestar especial atención al pelaje de los gatos, “ya que al ser muy tupido puede almacenar bacterias que, al pasar inadvertidas y proliferar, causan daños como dermatitis”.
Aun si el felino tiene pelo corto, la falta de higiene podría causar la aparición de hongos y el crecimiento de ácaros.
Por otra parte, Paredes indica que el cuidado del pelaje y la piel en los perros también es importante para evitar la aparición de patógenos. Los tres aspectos clave para cuidar el pelo y la piel de estas mascotas son lavado, cepillado y alimentación:

• Los cepillados son importantes para evitar enredos en el pelo.
• Para el lavado debes usar productos adecuados y evitar que se acumule la humedad. Lo mejor es el grooming cada 21 días para asegurar la higiene y detectar cualquier infección.
• Respecto a la alimentación, se recomienda evitar productos alergénicos, si la mascota es intolerante, por ejemplo a granos o carne de pollo, ya que podrían provocar reacciones cutáneas. En estos casos es mejor un alimento holístico.

Tanto para perros como para gatos, el entrevistado resalta la importancia de la desparasitación mensual o trimestral, según el producto que se utilice y las recomendaciones del médico veterinario, para evitar problemas de higiene y salud.

Atención con los ojos, nariz, oídos y dientes

“Retirar la suciedad de los ojos de la mascota, así como de la nariz, es importante para evitar enfermedades que puedan repercutir en el sistema respiratorio. Además, la mala higiene en los ojos puede causar úlceras y daño en la córnea”, explica Paredes.

Los oídos son clave para el equilibrio, por lo que si la mascota camina en círculos, podría ser señal de falta de higiene. Lo mismo si se rasca constantemente el área. Para limpiárselos, se recomienda utilizar toallitas húmedas especiales. Si notas inflamación y/o mal olor, lleva a tu mascota al veterinario, pues podría tratarse de una infección.

En cuanto a los dientes, es importante mantenerlos limpios para “evitar que se produzcan bacterias que den lugar a la formación de sarro, las cuales pueden dirigirse al sistema circulatorio y al corazón, causando fallos cardiacos”, advierte Paredes. Para esto, el mercado ofrece productos como pastas de dientes, cepillos y enjuagues, así como huesos y treats que ayudan a mantener la higiene bucal de tu mascota.

El corte o limado de uñas

Cuando no hay correcta limpieza de las uñas o se encarnan, los perros pierden firmeza y las patas se tuercen, llegando a provocar daño permanente. Los perros que se mantienen en un área con piso liso y no tienen acceso a un patio para gastar sus uñas, son más propensos a estos padecimientos.

“Los gatos tienden a cuidarse mucho, buscan muebles para gastar sus uñas, por eso es recomendable que cuenten con un rascador”, agrega el veterinario.

LA HIGIENE EN AVES, REPTILES Y PECES

Para cuidar la higiene de las aves es clave que estén en espacios amplios. No es recomendable darles pan, debido a su rápida descomposición, sino un alimento específico. “La limpieza de jaula debe realizarse cada tres días, por si acumulan bacterias que son dañinas para el ser humano u otras mascotas”, indica Lenin Paredes, veterinario de Arca de Noé.

Los reptiles tienen una piel muy delicada, por lo que sus jaulas deben tener malla tupida para que no se lesionen al intentar atravesarla. Requieren espacios con fuentes de calor a temperatura específica para su metabolismo.

La limpieza cada tres días es clave para evitar enfermedades como salmonelosis, en especial en serpientes. En cuanto a los peces, al defecar
liberan ácido úrico y otros compuestos que requieren limpiar la pecera cada semana para evitar que se mueran. De acuerdo con Paredes, debe cambiarse del 15 al 30% del agua, asegurándose de que esté fresca, no contenga metales pesados ni minerales.

Noé dice…

Para garantizar la higiene del perro, evitando la acumulación de ácaros, bacterias y malos olores, debe lavarse la cama o colchón cada 15 días. En los gatos se requiere limpiar el arenero cada tres a cinco días, y una limpieza general de la arena cada 15 días.