A diferencia de los humanos, los perros y gatos no sudan para eliminar el calor corporal excesivo. Aunque cuentan con unas cuantas glándulas sudoríparas en sus patas, estas no regulan su temperatura corporal. En cambio, lo hacen respirando rápido por la boca, lo que se conoce como jadeo. Sin embargo, algunas veces esto no es suficiente para evitar que se sobrecalienten.

También conocidos como hipertermia, los golpes de calor pueden ser peligrosos y potencialmente mortales. Los animales, especialmente aquellos con pelaje grueso o caras cortas (como los perros braquicéfalos), son más propensos a sufrirlos.

Estos siempre empiezan por agotamiento por calor. Si no se toman medidas para tratarlo, este puede evolucionar en un golpe de calor mortal.

El agotamiento por calor se da cuando la temperatura corporal de tu mascota se eleva por encima de su temperatura normal (en perros y gatos suele oscilar entre 38 y 39.2°C). Si la temperatura sigue aumentando y alcanza los 41 °C o más, tu mascota estará en peligro de sufrir un golpe de calor, durante el cual los órganos empiezan a dejar de funcionar y su corazón podría detenerse por completo.

¿Cómo identificar si tu mascota está sufriendo un golpe de calor? Las primeras señales son jadeo excesivo, hipersalivación, movilidad letárgica,
mucosas muy rosadas o azuladas y la lengua se ve como que cuelga pesadamente de su boca. También podría experimentar temblores y vómitos, explica Karla Pérez Archila, médico veterinaria de DANA.

La entrevistada comenta que las siguientes situaciones podrían llevar a tu mascota a sufrir un golpe de calor, por lo que debes evitarlas:

• Alta temperatura del ambiente, en las épocas más calurosas del año.
• Espacios reducidos, como estar dentro del carro, ambientes muy encerrados con poca ventilación.
• Escenarios donde no disponga de agua las 24 horas.
• Áreas muy soleadas y sin sombra.

MEDIDAS PARA PREVENIRLO

• Déjale siempre agua fresca durante todo el día.
• No dejes a tu mascota encerrada en lugares sin ventilación.
• Evita pasear a tu mascota durante las horas más calurosas del día, principalmente si es braquiocefálica.

¿QUÉ HACER SI SOSPECHAS DE UN GOLPE DE CALOR EN TU MASCOTA?

1. Mueve a tu mascota a un lugar más fresco: Llévala a un área con aire acondicionado.
2. Proporciónale agua fresca: Asegúrate de que tenga acceso a agua fresca, pero no la fuerces a beber.
3. Enfríala gradualmente: Usa paños húmedos y frescos en las patas y alrededor del cuello. Evita el agua fría o hielo directo, ya que puede causar una respuesta contraproducente del cuerpo.
4. Contacta al veterinario: Lleva a tu mascota a recibir asistencia médica tan pronto como sea posible.

Mi Vet dice…

Nunca dejes a tu mascota en un automóvil, incluso con las ventanas entreabiertas.