Chimaltenango

Niña de 12 años lucha contra la insuficiencia renal y sueña con ser repostera

Luego de dos años de padecer insuficiencia renal, Sucely Magalí Ajuchán Porras, de 12 años, originaria de El Tejar, Chimaltenango, será sometida a un trasplante de riñón que le donará su padre, con lo que espera cumplir su sueño de ser repostera profesional.

Los padres de la menor, Trinidad Ajuchán y Martina Porras, cuentan que han vivido un calvario desde el 2015, cuando Sucely fue diagnosticada con insuficiencia renal, pues debido a su condición económica pagar los tratamientos les ha sido complicado.

Agregaron que los problemas de salud de su hija empezaron por una hemorragia nasal, pues según los médicos la sangre que la menor tragó le bloqueo algunas arterias de los pulmones, lo que habría causado las complicaciones renales.

Trinidad Ajuchán recuerda que debido a la dolencia de su hija se ausentaba con frecuencia de la panadería donde trabajaba, por lo que fue despedido, por lo que desde hace más de un año y medio que está desempleado. Para agenciarse de fondos ahora elabora empanadas y las vende a los vecinos del sector.

Una luz al final del túnel

Luego de varios analices médicos a los hermanos y los padres Sucely se determinó que don Trinidad Ajuchán es combatible para donarle uno de sus riñones, por lo que la cirugía se efectuará el lunes próximo en el Hospital Roosevelt.

Ajuchán comentó que espera que luego del trasplante el calvario de su familia termine   y que su hija tenga otra oportunidad de vida, pues sueña con ser repostera profesional. 

“Por momentos me preocupa cómo voy a quedar. Quedaré normal para poder trabajar solo Dios lo sabe. Los médicos dicen que voy a llevar una vida normal, siempre y cuando me cuido, solo le pido a Dios que todo salga bien, ya que con tal de ver feliz a mi hija hago lo que sea”, comentó Ajuchán.

“Le hago un llamado a las personas para que nos ayuden en lo que puedan, ya que no podemos cubrir todos los gastos. A los médicos que llevan el caso de mi hija les agradecemos porque no van a cobrar por la operación, ya que según sabemos estas son bien caras. Tengo fe en Dios de que todo va a salir bien”, afirmó.

A pesar de que la niña ha estado sufriendo quebrantos de salud, no ha perdido la ilusión de seguir estudiando, prueba de ello es que en la actualidad cursa quinto primaria, en la escuela Miguel Sulecio Morales de El Tejar.


Los padres de la pequeña comentaron que es una niña muy aplicada y le gusta hacer sus tareas, por lo que la apoyan para que pueda cumplir sus sueños.

Martina Porras, madre de la menor, expresó: “La verdad hemos sufrido mucho con mi hija, solo Dios sabe lo que hemos pasado. Recuerdo que algunos días no teníamos dinero para dar para el combustible de la ambulancia que nos llevaba a la Unidad Nacional de Atención al Enfermo Renal Crónico, en la capital, a donde nos íbamos a las cinco de la mañana y regresábamos hasta las 10 de la noche.


“Esperamos en Dios y a la ayuda de las buenas personas porque tenemos que darle un cuidado muy especial para que no tenga ninguna recaída, ya que eso sería muy delicado, lo que me gusta de mi hija es que no pierde la alegría a pesar de tanto sufrimiento” comentó.

“Nos gusta cuando nos dice que quiere ser una profesional para ayudarnos, eso me motiva para hacer todo lo que este de mi parte para verla bien” refiere.

Sucely comentó que cuando sea grande quiere aprender a hacer pasteles y sorprender a sus familiares cuando cumplan años.

“En la escuela me gusta jugar con mis amigas y la materia que más entiendo es Matemáticas. Espero en Dios que todo salga bien para ya no ver a mis papás llorar y sufrir, porque eso me pone triste”, explicó Sucely.

La niña pasará unos tres meses en el hospital luego de la operación, pero cuando regrese a su casa necesitará una habitación adecuada, ropa y cama nueva y un sanitario propio, así como un lugar adecuado para que funcione como clínica en la que se le harán algunas curaciones.

Para apoyar a la menor se pueden comunicar al 58323219 o depositar a la cuenta de Banrural 48 20 03 36 41, a nombre de Trinidad Ajuchán 

En aislamiento

El médico especialista en trasplantes de hígado y riñón, Rudolf García-Gallont, comentó que un paciente como Sucely debe permanecer bajo aislamiento extremo durante los tres meses siguientes de la operación, debido a que por los medicamentos que se le aplicarán para que acepte el órgano, la menor es susceptible a cualquier y tipo de infección.

Añadió que el responsable de esas operaciones es el doctor Édgar Reyes, quien previo a practicar las cirugías se asegura que las condiciones higiénicas del lugar a donde será llevado el paciente llene las características necesarias, para garantizar el que el procedimiento sea un éxito.

Agregó que es importante que la familia siga al pie de la letra las recomendaciones de los especialistas, para complicaciones durante el proceso de recuperación.

Además, en el caso del padre de la menor, quien donó uno de sus riñones, comentó que el proceso de recuperación es diferente al de su hija, pues su organismo lo único que tienen que hacer es adaptarse a la falta de ese órgano, lo que significa que no puede haber rechazo por parte del cuerpo.

Tratamiento

  • La insuficiencia renal se puede tratar con trasplante de riñón, diálisis peritoneal, hemodiálisis o fármacos, según el avance de la enfermedad.
  • El trasplante sería el procedimiento ideal, pero es el más costoso y difícil de conseguir, ya que debe ser un donante con riñones sanos y compatibles con el paciente. Por ejemplo, ambos deben tener el mismo tipo de sangre.
  • La diálisis peritoneal y la hemodiálisis son tratamientos que eliminan artificialmente las sustancias tóxicas de la sangre. La primera es diaria y puede efectuarse en casa, pero la segunda debe practicarse dos o tres veces por semana en un centro especializado.
  • Es necesario buscar apoyo psicológico.

ESCRITO POR:

César Pérez Marroquín

Periodista de Prensa Libre especializado en temas políticos y de medioambiente con 25 años de experiencia.

ARCHIVADO EN: