De acuerdo con el artesano, anteriormente vendía instrumentos musicales andinos, pero debido a que el dinero no le alcanzaba aprendió a moldear el alambre.
Llega a Huehue
Vega manifestó que desde hace dos meses llegó a Huehuetenango, donde los vecinos de comunidades rurales valoran su arte, el cual perfecciona según sea la demanda de sus clientes.
“La gente es muy agradable en Huehuetenango, son más curiosos que en otras ciudades como Panajachel, donde hay demasiado extranjero”, explicó.
Añadió que muchos pobladores le han invitado a visitar los municipios para enseñar su trabajo y compartir con grupos de jóvenes.
Creatividad
Para la elaboración de sus productos Vega puede tardar entre 15 minutos y tres horas, según el tamaño y diseño.
“El grillo lleva más de una hora de trabajo, pero me apasiona lo que hago, porque gracias a eso he viajado por todos lados”, afirmó.
“Hago de todo lo que se me ocurre o lo que las persona quieran. Utilizo alambre de amarre y galvanizado, barniz y pintura para uñas”, explicó.
Vecinos de Huehuetenango consideran que el trabajo del chileno es admirable, pues posee habilidades para moldear el alambre.
Durante su travesía, Vega ha visitado Panamá, Costa Rica, Honduras, Nicaragua, El Salvador y varios países de Sudamérica y en los próximos días piensa viajar a México.