Cabeceras sin plan de desarollo urbano

Calles saturadas de tránsito  desordenado, mercados en las calles y  lotificaciones desorganizadas son algunos de los problemas que vecinos consideran que propicia el crecimiento anárquico en importantes ciudades de la provincia, en especial las cabeceras de Escuintla, Retalhuleu y Quetzaltenango.

Entre 85  y 90 mil vehículos circulan a diario en la ciudad de Quetzaltenango. Los congestionamientos viales se registran más en las zonas 1, 2, 3 y 9. (Foto Prensa Libre: Alejandra Martínez)
Entre 85  y 90 mil vehículos circulan a diario en la ciudad de Quetzaltenango. Los congestionamientos viales se registran más en las zonas 1, 2, 3 y 9. (Foto Prensa Libre: Alejandra Martínez)

Érick Méndez, vecino de Escuintla, expresó que aunque las autoridades aseguran que ordenan las ventas informales, cada vez se ven más comerciantes en las calles.

El alcalde, Pedro René Escobar, aseguró que busca  recursos para comprar un terreno y construir otro mercado, y que no desalojará a vendedores de las calles porque violaría  derechos de los comerciantes.

 El vecino Rubén Morán  dijo que la circulación  de tráileres y autobuses en esa ciudad  es alta, debido a que la comuna no ha seguido un plan de ordenamiento territorial.

En la ciudad de Retalhuleu, vecinos creen que el gran número de mototaxis ha propiciado que se reduzca la  circulación de automóviles, pero ha creado otra manera de atascos, pues  los choferes conducen negligentemente y se estacionan en cualquier lugar.

También afecta el alto índice de ventas callejeras. La residente Loida López  indicó que la municipalidad,  aunque sea la señalización  vial debería  coordinar.

El alcalde, Luis Galindo, aseguró que ya coordinó con el Ministerio de Gobernación para la señalización vial.

El programa empezó hace dos semanas, y lo lleva a cabo el Departamento de Tránsito de la Policía Nacional Civil.

En Quetzaltenango, José Ortega, oficial de la Policía Municipal de Tránsito, resaltó que a diario   circulan entre 85 y 90 mil vehículos, y su flujo se concentra alrededor de los mercados La Democracia y Terminal Minerva, ambos en la zona 3.

Migración interna

Otro de los problemas es la migración interna, pues a esa ciudad llegan estudiantes, profesionales, comerciantes y trabajadores de toda la  región.

Según Silvia Rivera, coordinadora de la  Oficina de Ordenamiento Territorial y Planificación Urbana de la Municipalidad quetzalteca,  hay aproximadamente 50 mil viviendas, incluyendo condominios; sin embargo, cada poblador solo cuenta con  0.9 metros  cuadrados de área verde,  y lo estipulado son 10 metros para cada uno.

Rivera  señaló que en la actualidad no cuentan con un plan de ordenamiento territorial  debido a que se basan en el Plan Regulador del Valle de Quetzaltenango que entró en vigor en   1983 y  estaba proyectado para el 2000, pero ya trabajan en el nuevo.

Añadió que las zonas 1 y 3 son las  únicas trazadas  adecuadamente, aunque la primera mencionada tiene calles angostas, debido a que fue planificada en una época distinta.

 Miguel Ángel Chacón Véliz, arquitecto y planificador urbano, refirió que el problema común es la carencia de un plan de desarrollo urbano integral sustentable que contemple soluciones a corto y largo plazos, y en el que se incluya a todos los actores de la ciudad —público, privado, vecinos y organizaciones—, y se tome en cuenta al área rural.

“Estos actores deben empoderarse del plan  para prever la distribución de las áreas en que estará dividida la ciudad, y cómo resolver sus diferentes problemas. Se debe  tener visión, ya que después  de nada servirá protestar y retener al jefe edil para solucionar una dificultad”, aseguró Chacón Véliz.