En el referido cementerio al igual que otros camposantos, desde la madrugada de este domingo se observó a hombres, mujeres y niños que colocaban arreglos flores y coronas de flores en los mausoleos de sus seres queridos.
Algunos también llevaron alimentos para disfrutarlos en familia y recordar los buenos momentos que vivieron junto a sus pariente que ya partieron.
“Por cuestiones laborales, desde hace años radico en la ciudad capital, pero cada 1 de noviembre vuelvo a mi lugar de origen a adornar con mi familia la tumba de mis padres”, manifestó Amílcar Luis Zapeta.