El caso de Alonzo Cortez está identificado como MP157-2023-1863 y la investigación fue direccionada por la Fiscalía de la Niñez y Adolescencia de Coatepeque, Quetzaltenango.
El 24 de mayo a las 18:30 horas las autoridades ubicaron y presentaron a un adolescente ante un juzgado especializado porque existía una orden de conducción en su contra.
Al menor lo localizaron en la vía pública, sobre la 17 calle y 9a avenida, zona 4, en la lotificación Perú, Retalhuleu.
El niño que fue conducido nació en ese departamento el 24 de enero de 2010. La PNC lo presentó ante el juez de primera instancia de la niñez y adolescencia en conflicto con la ley penal de Retalhuleu, Herber Roberto Archila Ruano, quien le hará saber los motivos de su detención.
Al menor lo señala el MP del homicidio del alumno Arón Manasés Alonzo Cortez.
Un equipo de la Deic, bajo requerimiento de la Fiscalía de la Niñez y la Adolescencia, comenzó las pesquisas para determinar la participación de más personas en la muerte de Alonzo Cortez.
Durante la investigación, los detectives determinaron que Aron Manasés era víctima de acoso escolar – bullying – dentro de su centro escolar, la escuela oficial Manuel de Jesús, que se ubica en la zona 4 de Retalhuleu.
La madre y la denuncia
La denuncia de la madre fue crucial para seguir la pista hacia las posibles personas involucradas en el hecho. Según ella semanas antes del desenlace falta, su hijo le confesó que en al menos tres ocasiones había tenido problemas con otras personas, pero particularmente con otro adolescente.
Eso le hizo sospechar que podría haber sido víctima de abuso escolar. El adolescente le habría comentado sobre una pelea, pero no se extendió más. Según la madre, los relatos de su hijo eran breves, pero en la escuela ya tenían conocimiento de cada caso.
La madre del menor interpuso la denuncia, pero considera que los problemas comenzaron en la escuela, según lo que su hijo le relató luego del primer incidente.
Pero el 2 de mayo, la madre asegura que al regresar del trabajo lo encontró con golpes y lo llevó al hospital de inmediato. El niño tenía una protuberancia en el cuello, el brazo inmóvil y no podía mover la boca.
“Se puso a temblar, a llorar y me dijo que eran los que andan con William. Desconozco si son de su grado, pero no pudo contarme más porque después de su ingreso, entró en coma y falleció horas después”, relató la madre ante la PNC.