José Morán, coordinador, comentó que antes de la elevación de globos de papel se desarrolló un desfile de carrozas y un show infantil. Además, se vendieron antojitos para que todos los fondos recaudados sirvan en el remozamiento de la iglesia San Antonio de Padua, ya que quedó dañado por los sismos recientes.
“Este evento ha sido un éxito y cada año y lo recaudado lo donamos a una institución de servicio a los retaltecos; sin embargo, este año se hará la restauración de los daños que tiene la iglesia central de Retalhuleu, porque es parte del patrimonio cultural”, expresó Morán.
La vecina Moreca Monterroso, indicó que el momento de la elevación de los globos fue mágico y al mismo tiempo compartieron en familia y bajo la luz de los faroles. “fue un espectáculo ver volar los globos luminosos en el cielo”, dijo.
“Con mi familia compartimos el deseo de salud y trabajo para el próximo año y este evento nos unió en el mismo pensar, porque somos una familia trabajadora que cada año buscamos superarnos”, expresó Monterroso.
Édgar Ajpop, otro vecino de esa ciudad, comentó que fue hermoso presenciar a varias familias elevar un globo y las risas de los niños fueron algo especial, porque se sintió la magia de la Navidad y fue algo especial que todos disfrutaron.
Participan en posadas
Otro grupo de vecinos participó en las posadas que recorren las calles de la cabecera retalteca entre sonidos de las caparazones de tortuga y la luz de faroles, otra de las tradiciones de la temporada.
Desde las 20 horas las posadas recorren las calles, y reúnen a una gran cantidad de personas que acompañan con cantos de villancicos.
Teresa García, organizadora de las posadas, indicó que las miniprocesiones salieron desde el viernes para concluir el próximo sábado 23, y en el transcurrir de los días se visitarán hogares de diferentes familias, quienes reciben la posada con mucha fe.
“Estamos fomentando las tradiciones a nuestros niños, porque se está perdiendo la ilusión de acompañar las posadas por barrios y cantones de la localidad, y al darle participación a los menores hace que ellos se formen en las tradiciones de nuestro país, expreso García.
Cristal Wilson, residente en la ciudad, indicó que se recorren diferentes calles y avenidas de la cabecera, donde se camina aproximadamente una hora, después se llega al hogar donde la reciben y se comparte entre hermanos la alegría de la espera del nacimiento del Niño Jesús.
“Todos los años mi familia participa en las posadas, haciendo esta actividad navideña una fiesta entre vecinos y personas que vienen de otros lugares”, expresó Wilson.