Productores y diversos comercios mostraron vistosos y coloridos arreglos florales, macetas y ornamento en espacios culturales en la ciudad colonial.
Andrea Contreras, presidenta y fundadora del Festival de las Flores de Antigua Guatemala, indicó que les ha tocado reinventarse derivado de la pandemia, y que el año pasado las actividades fueron en su mayoría de manera virtual y algunas exposiciones pequeñas.
Este año, indicó, se restringieron algunas actividades limitándose a concursos de fachadas pero no tuvieron concursos libres con el fin de evitar aglomeraciones, pero al final sí atrajo muchos visitantes.
También contaron con un mercado de flores instalado enfrente al Real Palacio, con participación de 40 productores de variedades como suculentas, sombreros o artes con flores, y otros.
Según Contreras, en el último año prepandemia en el 2019, alrededor de medio millón de personas llegaron a Antigua para el Festival, mientras que este año la afluencia fue menor a esa.
Jairo Juárez, productor de anturios de varios colores y formas, dijo que es el cuarto año que participan, menciona que se prepararon meses antes, y les ayuda a incrementar las ventas del mes. Los ciclos de producción van desde varios meses hasta 5 años.
Carlos Manzo, tiene su vivero en la capital, y es la primera ocasión que participan pero, comentó, tuvieron mucha demanda de flores como suculentas, cactus, bromelias y otras.
Walter Fisher, secretario de Turismo y Economía de la Municipalidad de Antigua Guatemala, comentó que tuvieron una alta afluencia, aspecto que permitió al sector turístico impulsar su reactivación con ocupación hotelera y de restaurantes mucho mayor a otros fines de semana.
Fueron dos días atípicos desde que inició la pandemia, ya que por lo regular cada fin de semana ingresan alrededor de 20 mil vehículos, pero en esta ocasión se estima que ingresaron unos 80 mil automotores, con visitantes atraídos por el Festival de las Flores dijo el funcionario.
El municipio estuvo por varios meses en alerta roja según el semáforo epidemiológico por casos de covid-19, pero hace alrededor de un mes le fue cambiada a amarilla porque bajaron los casos, se añadió.
Agregó que fue de mucha motivación para el sector turístico, pero un reto para la municipalidad en términos de estrategias de bioseguridad. “Estuvimos sobrepasados como destino en visitaciones, pero el sector de turismo de Antigua obedeció los protocolos y los aforos hasta donde les fue posible”, expresó.
Sin embargo, muchas de las calles y parque fueron abarrotados y se observaba que no había distanciamiento físico. Usuarios en redes sociales se quejaron que colapsó el tránsito de vehículos en la ciudad debido al alto número que ingresó el fin de semana.
Contreras dijo que el Comité del Festival de las Flores, envió una carta al Ministerio de Salud departamental dando a conocer las actividades como decoración de monumentos, mientras que concierto y otras actividades los realizan en otro lugar al aire libre con aforo limitado, pero según explicó, como ya se volvió una tradición en la ciudad es inevitable que las personas en forma independiente coloquen flores.
Indicó que la oficina de Salud les respondió que debían tener la autorización de la municipalidad y que se acatara el aforo. “Con lo del semáforo amarillo la gente se sintió con más libertad” de acudir.
Este año el festival estuvo dedicado a los polinizadores llevando un mensaje de primavera y florecimiento, se agregó.