Guatemala

Desborde de fe en procesión del Nazareno de la Caída de San Bartolomé Becerra 

Entre colorido y devoción, miles de creyentes acompañan la procesión de la Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de la Caída de la aldea San Bartolomé Becerra que recorre las calles empedradas de Antigua Guatemala, Sacatepéquez, desde las 6 horas.

El cortejo reproduce la parábola de El rico Epulón y el pobre Lázaro que narra el Evangelio de San Lucas en el capítulo 16, versículo del 19 al 31, que describe a un hombre rico que se vestía de púrpura y lino fino, y que banqueteaba espléndidamente cada día, mientras Lázaro, siendo un mendigo, se saciaba con lo que caía de la mesa del rico, y los perros le lamían las llagas.

En el centro del anda marcha la imagen del Nazareno vestido con una túnica dorada de fino terciopelo bordada a mano con hilos de oro. Al final de la escena, de nuevo aparece el rico Epulón y Lázaro; el rico atormentado ruega misericordia en el infierno, mientras que Lázaro en el seno de Abraham.

Carlos Pellecer, presidente de la hermandad, comentó que unos nueve mil cucuruchos acompañan el cortejo que hoy cumple 114 años, desde 1902.

Más de un siglo de fe y devoción

El quinto domingo de Cuaresma se ha convertido en un desborde de fe y tradición en Antigua Guatemala, Sacatepéquez, por la procesión de la Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de la Caída de la aldea San Bartolomé Becerra, cortejo procesional que recorre desde 1902.

La imagen de rodillas recibe la devoción de guatemaltecos y extranjeros  que abarrotan este día la ciudad colonial para apreciar el paso de la imagen que,  históricamente, es una de las procesiones más antiguas.

Sale de su templo a las 6 horas  y  retorna a su sitial pasada la medianoche.
114 años de historia

Hiram Salazar, de relaciones públicas de la Hermandad, explicó que datos históricos de la organización y otros  recopilados por Luis Ramírez y Édgar Santacruz, destacan la historia que  dividen en dos ciclos: una desde la Colonia hasta 1902 y otra de 1902 a la fecha.

Salazar explicó que se desconoce quién esculpió la imagen del Nazareno de la Caída, aunque se la atribuye a Pedro de Mendoza,  pero  no existe fuente documental, tampoco conocen el año en que la imagen llegó al templo de San Bartolomé Becerra.

El vocero de la Hermandad explica que en 1959, Jorge Aguirre Matheu  publicó en el diario El Imparcial  un artículo donde consigna una serie de datos relacionados con la primera procesión de Jesús de la Caída.  Remarca que estos datos son importantes, pues Aguirre fue  hijo de los dueños de la finca Retana, de donde provino la escultura.

   Refiere que este cortejo procesional salió por primera vez el 23 de marzo de 1902, siendo  Aguirre y su hermano Carlos quienes la organizaron, cumpliendo así con una petición de sus padres.

En la procesión participaron vecinos de la aldea, encabezados por Encarnación Sicay y mozos de las fincas vecinas.

Evolución

Según los datos históricos de la hermandad, en 1920 las andas procesionales eran de seis y ocho brazos, y salían de cuatro a cinco tandas, cifra que ha cambiado considerablemente,  ya que  para este año son 103 tandas de cargadores de 90 hombros cada una, lo que hace una participación de 9 mil 270 personas.

Ese crecimiento ha hecho que autoridades locales preparen toda una logística para recibir a más de un millón de personas. Hace un año ingresaron unos ocho mil 300 vehículos livianos,  310 microbuses  y 240 buses.

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