“Las mujeres deberían quedarse en la cocina y no arbitrar partidos de hombres”, expresó el arquero Tomas Koubek, aludiendo a Ratajova.
Esta última, juez de línea, no señaló el pasado domingo un fuera de juego durante el partido Zbrojovka Brno – Sparta de Praga, lo que permitió al conjunto local marcar el 3-3 en los últimos instantes del partido.
El centrocampista Lukas Vacha imitó a su compañero aconsejando a la colegiada que se fuese “a la cocina”, en una red social.
“Los que participan en competiciones profesionales deben comportarse como profesionales”, afirmó este jueves el jefe de la comisión de disciplina de la federación, Richard Bacek, luego de sancionar a los jugadores con 40 mil coronas checas (1.500 euros), así como la obligación de dirigir un entrenamiento de jóvenes.
El Sparta de Praga se mostró más ingenioso: los dos machos deberán entrenarse varios días con el equipo femenino del club, para que se den cuenta de que “las mujeres se desenvuelven bien no sólo en la cocina”.
Dos futbolistas checos se entrenarán con mujeres tras sus insultos machistas https://t.co/7CXGPmpeg8
— EL MUNDO (@elmundoes) October 4, 2016
La árbitra, por su parte, pagó caro su error: la prensa checa la llamó “la cocinera checa más famosa”, y estará cuatro fechas castigada sin arbitrar.