El italiano Carlo Ancelotti sentó a cinco de los jugadores que se midieron al Real Madrid en ese partido de la ida de los cuartos de final de la Champions: Philipp Lahm, Jerome Boateng, Xabi Alonso, Arjen Robben y Franck Ribéry, y el equipo lo acabó acusando.
Pese a que los muniqueses llevaron la inicitiva la mayor parte del encuentro, pocas veces rondaron con verdadero peligro la portería de Bernd Leno. Ni siquiera la expulsión del croata Tin Jedvaj, en el minuto 59 tras una doble amarilla, le sirvió al líder para desatascar el encuentro.
Ancelotti movió el banquillo a mediados de la segunda parte dando entrada, entre el minuto 60 y 70, a Robben, Alonso y Lahm, pero el marcador ya no varió.
Por su parte, el tercer y cuarto clasificado, Hoffenheim y Borussia Dortmund, respectivamente, también ganaron sus duelos.
El Hoffenheim se impuso en su estadio al Borussia Mönchengladbach (8º) en un trepidante partido que acabó con 5-3 para los locales; mientras que el Borussia Dortmund se desquitó de la dolorosa derrota del pasado miércoles ante el Mónaco (3-2), venciendo al Eintracht Fráncfort, noveno, por 3-1.