Ya campeón de la Ligue 1, el París SG dio el segundo paso para conquistar su segundo triplete consecutivo. Ahora le falta la Copa, en la que disputará la final ante el Marsella el 31 de mayo.
El título logrado este sábado sirve además al grupo dirigido por Laurent Blanc para curarse las heridas después de haber caído por cuarto año consecutivo en los cuartos de final de la Champions, en esta ocasión ante el Manchester City (2-2, 1-0) hace diez días.
En las afueras de París, el PSG se apoyó en un excelente Pastore. Tras una temporada marcada por los problemas físicos, El Flaco se desquitó con una exhibición de calidad, elegancia y eficacia.
Su actuación mayúscula fue recompensada con el primer gol, cuando remató de volea a la salida de un córner, en un balón en el que el arquero del Lille, el nigeriano Vincent Enyeama, fue molestado por Layvin Kurzawa, en posición de fuera de juego.
A continuación el Lille empató con un golpe franco de Sidibé. Ya con un hombre menos el PSG se llevó el trofeo con un gol de Di María, otro de los grandes nombres de la noche en el Estadio de Francia.