Los parisinos se deshicieron con solvencia (3-0) el viernes del débil Valenciennes y parecen haber recuperado la forma para encarar en plenas facultades el tramo decisivo de la temporada.
Salvo la Copa de Francia, en la que cayeron contra el Montpellier (2-1), el PSG aspira a todos los títulos por primera vez desde que el club pasó a manos de sus nuevos propietarios cataríes.
Al principio de la temporada los objetivos eran claros. Conservar el título de campeón de Francia, conseguir una copa nacional y mejorar el resultado del año pasado en Champions, cuando perdieron ante el Barcelona en cuartos de final.
De puertas para fuera, el club apela a la prudencia, pero la ambición del PSG es muy grande y de acuerdo a los medios con los que cuenta ha formado un equipo de ensueño.
