El Real Madrid, que al final pudo jugar de inicio con su alineación de gala de las últimas semanas al recuperarse de las molestias físicas que arrastraban tanto el portugués Pepe como el croata Luka Modric, arrolló al Granada, que solo ha logrado un punto en las seis últimas jornadas, en una primera parte en la que dejó el choque casi sentenciado.
Todo se puso de cara para los blancos cuando, antes de que se alcanzara el minuto dos de partido, Carvajal robó el balón al colombiano Jeison Murillo junto a línea de fondo, conectó con Benzema y éste con Cristiano, que superó a Roberto Fernández sin problemas con un chut fácil desde el punto de penalti.
A partir de ese momento se vio a un Real Madrid muy cómodo sobre el campo, jugando con pausa y criterio al son marcado por un sobresaliente Isco y acelerando en los últimos metros para tratar de dejar el choque resuelto cuanto antes, pese a que durante varias fases del choque dio la sensación de actuar con el freno de mano echado.
Antes del minuto 10 ya pudo ampliar el marcador con un disparo de Benzema en franca posición para marcar repelido por el cuerpo de Murillo y con un lanzamiento lejano e intencionado de Isco que marchó fuera por poco.
Un buen ejemplo de la superioridad y el preciosista juego de los madridistas llegó en el minuto 25 con una gran y larga acción colectiva del cuadro visitante que acabó con un disparo de Carvajal que rozó el 0-2.
El segundo gol no tardó en producirse, en el minuto 31, y nació en un saque de banda recibido por Benzema, quien se inventó un pase de espuela por encima del defensa rival sobre James, quien superó a Roberto con una volea tan espectacular como imparable.
Con dos goles ya en contra empezó a aparecer en ataque un Granada con muy pocas ideas ofensivas, y con un once titular defensivo y atípico que estuvo condicionado por las bajas de Fran Rico y Francisco Medina Piti.
Una indecisión entre Pepe y Sergio Ramos dejó al colombiano Jhon Córdoba solo ante Casillas, aunque el colombiano estuvo muy lento y ni llegó a disparar.
Un tímido intento de Murillo que paró Iker Casillas fue el único disparo a puerta de los locales antes del descanso.
La única mala noticia para el Real Madrid en la primera parte fue la lesión de Carvajal, que en un lance fortuito tuvo que ser sustituido, aquejado de problemas musculares, por lvaro Arbeloa.
La entrada al campo de Javi Márquez mejoró tras el intermedio al Granada, que probó a Casillas con lanzamientos de Jhon Córdoba y del marroquí Youssef El Arabi, que también entró por el joven nigeriano Isaac Success, que se fue lesionado.
Para acabar con cualquier esperanza rojiblanca apareció de nuevo en el minuto 54 Cristiano para asistir de tacón a un Benzema que coronó otra gran actuación personal superando sin problemas a Roberto en el mano a mano para firmar el 0-3.
En pleno aluvión de juego del Real Madrid, el brasileño Marcelo Vieira quiso unirse a la fiesta con hasta tres ocasiones, pero primero mandó el balón al larguero y después disparó alto en dos claras opciones para marcar.
En el último cuarto de partido, con un Madrid relajado y un Granada sacando orgullo propio y con mucho más fútbol en el campo tras las entradas de Javi Márquez, El Arabi y Rubén Rochina, ambos equipos pudieron modificar el marcador.
Sergio Ramos sacó bajo palos dos claras opciones locales y Casillas se lució en el mano a mano ante Javi Márquez, mientras que en el otro área Roberto se interpuso entre Arbeloa y el gol.
Cerró la cuenta anotadora James en el minuto 86, en colaboración con el francés Jean Silvayn Babin, tras un remate en semifallo de un Cristiano que rozaba el fuera de juego.
