Leporovski refirió que no solo las economías locales se resentirán, sino también las de los lugares de origen de flujo de trabajadores migrantes que cada año se trasladan a las áreas cafetaleras para la cosecha.
El empresario citó como ejemplo a Santa Rosa, que recibe migrantes de Jalapa, Baja Verapaz y Quiché.
“La economía de esos lugares se verá afectada porque los trabajadores temporales que regresaban con recursos económicos para el consumo ya no tendrán a dónde ir”, afirmó.
El ministro de Trabajo expuso vía telefónica que la reunión de ayer es la primera y busca comenzar el proceso de análisis de la situación y sus consecuencias.
Agregó que debido a la situación de emergencia se espera tener concluida esta misma semana el informe para delinear la política para atender los aspectos económicos y agrícolas, así como los de tipo social y laboral.
Según Contreras, se calcula que el universo de trabajadores temporales y no temporales que laboran en café es de alrededor de 500 mil.
“Parte de lo que este grupo interinstitucional definirá es a cuánto corresponde el flujo de trabajadores temporales, de qué lugares provienen y hacia dónde se dirigen”, dijo Contreras.
Este martes, según Leporovski, el consejo de ministros conocerá sobre la problemática por medio de una presentación que elaboró Anacafé.