Las compras de bonos de la FED están destinadas a mantener en un bajo nivel las tasas de los préstamos a largo plazo, para impulsar el gasto y el crecimiento económico.
“Estamos en una economía de lento crecimiento con altas tasas de desempleo y baja inflación”, explicó Greg McBride, analista financiero de Bankrate.com.
“No hay un catalizador específico para que la FED retire su estímulo”, señaló.
En el comunicado, el instituto financiero refirió que la economía crece moderadamente y que han mejorado algunos indicadores del mercado laboral.
Sin embargo, señaló que el aumento de las tasas hipotecarias y los recortes del gasto público restringen el crecimiento.
La FED también reiteró que planea mantener su tasa de interés de corto plazo cerca de cero, por lo menos hasta que el desempleo, que se ubicó en 7.3% el mes pasado, caiga a 6.5%.