La construcción de la planta generadora Palo Viejo, en Quiché, se paralizó desde febrero hasta junio del 2011, luego de que un grupo de comunidades exigía regalías y carreteras, entre otras obras sociales, y la construcción se retomó con atrasos.
Smith explicó que en la actualidad la planta ya alcanzó la sincronización con el Sistema Nacional Interconectado, y aunque ya está en capacidad de operar, se encuentra en este momento en fase de pruebas para posteriormente iniciar la operación comercial lo cual podría suceder en unos 60 o 90 días.
Esta central de energía renovable, cuyo proyecto ha contado con una inversión inicial de 185 millones de euros y en cuyo desarrollo participó la Simest (sociedad semipública de Italia promotora de las empresas italianas en el exterior), evitará que se emitan a la atmósfera 280 mil toneladas de dióxido de carbono cada año, informó la compañía en un comunicado.
En la nueva instalación de EGP, se ha invertido US$4.5 millones se agregó, para promover el desarrollo económico y social de las comunidades indígenas que viven en la zona. La planta usará la corriente del río Cotzal y sus tres afluentes.
“Palo Viejo”, es la quinta central hidroeléctrica de Enel Green Power en Guatemala, que llega a una capacidad instalada con energías renovables de 161 megavatios en Guatemala y a 754 megavatios en toda Latinoamérica.
“Palo Viejo constituye una clara demostración de la capacidad de realizar plantas en Latinoamérica, zona geográfica con un gran potencial de crecimiento, donde estamos ya ampliamente presentes”, comenta en la nota el consejero delegado de EGP, Francesco Starace.