Guatemala trasladó el equipo de protección eléctrico ubicado en la frontera con El Salvador y Honduras, y lo reubicó hacia México.
¿Ahora qué procede?
En Guatemala operan dos plantas de energía solar.
Horus Energy, con capacidad de 80 Megavatios (MW) y Sibo, con 5 MW.
También existe una eólica, en San Antonio el Sitio, Villa Canales, con 52 MW.
Hay otra eólica, en Escuintla, es Viento Blanco, que está pendiente de empezar a operar.
La matriz energética del país pasó de generar 50.2% de electricidad con recursos renovables en el 2007 a 64.5% en el 2014.
El aporte de las tecnologías solar y eólica es de 1.87% y 1.68% del total de la matriz.
El acuerdo fue mover los equipos de Guatemala, pero simultáneamente los países del área deben hacer ajustes en sus sistemas para evitar oscilaciones y que ocurran eventos. (como cortes o apagones).
Se definió una ruta que incluye los estudios para eliminar las oscilaciones, y ya se empezó a ejecutar.
¿Hay generadoras en otros países que provocaban oscilaciones o hasta apagones?
Sí. En Guatemala ya se hicieron refuerzos, pero siguen existiendo algunas condiciones en ese sentido en otros países.
Hay acciones relacionadas a la instalación de generadoras en Centroamérica, especialmente un parque solar en Honduras, por ejemplo.
Esto implica que debe existir análisis profundos y técnicos de la operación de este tipo tecnologías.
¿La Crie analiza regulaciones en el área?
El Ente Operador Regional (EOR), que es el operador del Siepac, está haciendo los análisis del cumplimiento de parámetros técnicos para mantener la estabilidad del sistema y no afectar a otros países.
En el país hay instaladas dos plantas generadoras de energía solar, una eólica y otra en proceso de instalación. ¿Qué se hace al respecto?
La producción de energía de estas tecnologías depende en que exista el recurso primario, en este caso viento y sol. Pero si no hay ninguno de estos dos recursos en forma adecuada para producir, la generación cesa de una manera abrupta, entonces los sistemas deben tener las reservas necesarias para que esa operación sea estable.
En el país y en la región se trabaja en eso porque la tendencia está enfocada en instalar más plantas con este tipo de tecnología.
¿Qué tipo de protección se deberán regular?
Son varias instancias. Existen tecnologías de almacenamiento de energía —como el equivalente a unas baterías—, que sirve para regular, pero el otro punto es aumentar las reservas operativas del sistema eléctrico.
¿Guatemala necesitará aumentar sus reservas?
Sí. Ese es el análisis que se está haciendo ahora, a cargo del Administrador del Mercado Mayorista (AMM).
No todas las horas del día son iguales ya que cambia la producción, pero también la demanda.
Por ejemplo, en horas de la madrugada la demanda es menor, pero ahí no hay generación solar, aunque puede haber de viento.
Y en el día hay más generación solar y la demanda es mayor. Todos esos elementos son los que evalúa el AMM para dimensionarlas correctamente.
¿Cuándo deberá tomarse esa decisión?
Se ha estado trabajando en una agenda para tratar de tener los estudios lo antes posible, porque también hay que tomar decisiones.
¿Cuánto debe tener el país de reservas?
Guatemala tiene el doble de capacidad de generación respecto a la demanda de energía, por eso no hay problema.
Sin embargo, para atender las variaciones en la generación solar y eólica se necesitan reservas, cuyas plantas tienen que estar en operación para atender los cambios abruptos en esta generación.