Juan Francisco Solórzano Foppa, jefe de la SAT, afirmó que con la medidad “el Directorio demuestra su compromiso con la transparencia”. Agregó que era indispensable fortalecer la SAT, recuperar su institucionalidad y de allí era donde surgía la política de trabajo de “cero tolerancia a la corrupción”.
Foppa explicó que el objetivo de la nueva gerencia, que forma parte de los proyectos del plan de trabajo del Superintendente, es prevenir y combatir actos de corrupción, faltas e infracciones administrativas; así como cualquier otro acto que contravenga los intereses institucionales.
La nueva dependencia estará integrada por dos áreas: Una de investigaciones internas y la otra de análisis de información y confiabilidad.
De acuerdo con el boletín, las acciones serán reportadas directamente al Directorio de la SAT, por lo que todos los funcionarios y empleados de la institución podrán ser investigados si los actos que realicen en el ejercicio de su trabajo, son contrarios a las normas y Leyes que rigen la institución.