Byron Thomae, director de Sanidad Animal del Maga, indicó que las regiones afectadas son Alta Verapaz, San José del Golfo e Izabal, con un caso cada uno, Huehuetenango, con seis, y San Marcos y Petén, con tres.
Thomae explicó que se produce un repunte de enfermedades cuando se dan cambios climáticos o alguna situación que modifica el medio natural que afecta el entorno del murciélago vampiro que produce la rabia y ataca a los animales.
El funcionario opinó que existe falta de prevención por parte de los ganaderos, porque es una enfermedad que se puede prevenir, y aconsejó vacunar las reses porque es “mejor invertir Q10 a perder su patrimonio”.
Cambio de zonas
El funcionario informó que desde 1970 se producen brotes de rabia en el país, pero entonces se ubicaban al sur y en la actualidad se registran al norte.
En ese sentido, Ramiro Pérez, asesor de la Cámara del Agro, comentó que las zonas ganaderas están ubicadas en lugares marginales, donde se encuentran cuevas o bosques frondosos, por lo que se empezaron a presentar “más incidencias de mordeduras de estos animales”.
Pérez manifestó que el sistema de vigilancia del Maga está debilitado y no cuenta con la capacidad financiera ni el personal para analizar los casos de la enfermedad.