La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) reveló que los lugares con más problemas son La Libertad, Melchor de Mencos, San Benito, Santa Ana, Santa Elena, El Chal y Dolores, todos en Petén, y estimó que unas 466 personas fueron afectadas y 246 albergadas, así como 89 viviendas con daños. La entidad mantiene cinco albergues habilitados.
Xiomara Blanco, gobernadora de Petén, indicó que Melchor de Mencos, en la zona fronteriza con Belice, fue el lugar más perjudicado. En el barrio El Arroyito, de esa localidad, un puente colapsó por la fuerza del río. Un motorista que lo cruzaba en ese momento quedó lesionado.
Las autoridades desplazaron cuatro equipos de intervención a los departamentos donde la lluvia es más intensa para apoyar a las familias.
La Conred envió 15 toneladas de atol fortificado, raciones familiares y agua pura.
Edwin Martínez, delegado de la Conred en Petén, afirmó que mantendrán la alerta amarilla y continuarán con los monitoreos.
Lluvia sigue
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología comunicó que la tormenta seguirá rumbo al oeste y se mantiene el peligro por la velocidad del viento de hasta 70 kilómetros por hora.
La lluvia ocasionada por este fenómeno permanecerá hasta hoy, aunque el fin de semana seguirá, aunque será por la época de invierno que concluirá a finales de octubre.
Lorena: Tuvimos miedo
Con el rostro afectado tras una de las peores noches de su vida, Lorena Leonardo asegura que difícilmente podrá olvidar la angustia que vivió ante el paso del huracán Earl, que dejó inundada su casa en Melchor de Mencos, Petén, muy cerca de la frontera con Belice.
“Tuvimos mucho miedo”, relata a la AFP esta ama de casa de 42 años, una de las afectadas por el paso del huracán Earl, ya degradado a tormenta tropica.
“La casa ya se nos había llenado de agua. Tenemos un bebé y teníamos miedo de que se fuera a ahogar”, agrega Lorena, quien forma parte del más de medio centenar de personas que esperaban por alimentos y colchones en un albergue improvisado cerca de este poblado, a 300 kms al noreste de la capital.
A medianoche del miércoles, bajo intensas lluvias, Lorena junto a su esposo y cinco hijos debieron abandonar su vivienda de madera y láminas de zinc para ponerse a salvo, pero ahora les preocupa el futuro.
La tormenta tropical Earl, que antes de impactar Belice la madrugada del jueves había alcanzado la categoría de huracán 1, de una escala de máximo 5, también provocó el colapso de un puente y dejó herida a una persona que circulaba en una motocicleta.
Inundaciones y árboles derribados
“La base del puente no soportó la correntada y cedió”, contó el comerciante Otoniel González, quien asegura haber visto el momento en que la estructura cayó por la fuerza del agua.
Aunque los cuerpos de socorro descartaron que haya víctimas por el percance, González y otros vecinos afirman que un adolescente se encuentra desaparecido.
Por su lado, el alcalde municipal Luis Yanes explicó que además de personas alojadas en refugios comunales, la alcaldía atiende con ayuda humanitaria a otras 50 que prefirieron quedarse en sus casas para proteger sus pertenencias.
“Están cuidando sus cosas que les han costado y tienen miedo de salir de sus casas, porque usted sabe que siempre hay aquellos que se aprovechan de lo ajeno”, detalló Yanes.
Aunque el pueblo se encontraba sin servicio de electricidad, algunos negocios empezaban a abrir sus puertas y la normalidad se iba restableciendo.
En el municipio de Flores, también en Petén, las lluvias causaron que dos torres gigantes del tendido eléctrico cayeran sobre la carretera, observó la AFP.
En diferentes tramos carreteros de los poblados de Dolores y El Chal, el agua había superado el nivel del asfalto y varios cultivos de maíz se encontraban anegados.
“Hay personas que no quieren salir” de viviendas afectadas por leves inundaciones, aseguró un bombero acompañado por soldados que recorrían diferentes calles de Dolores.