“Nuestros postulados fueron no al aborto, no al matrimonio del mismo género y no a la educación sexual por parte del Gobierno. Se hizo una proclamación en el Palacio nacional de la Cultura y se le entregó a las autoridades un pliego de peticiones por parte de la iglesia evangélica, además abrir una mesa de diálogo para analizar si existe una ley que atente contra la familia”, explicó el religioso.
Durante la concentración las personas oraron en favor de la paz de Guatemala, el Estado de Israel y por las autoridades del Estado.
La proclama iba dirigida a los presidentes de los tres organismos del Estado. A cada uno se le va a entregar la petición y la postura de la iglesia evangélica sobre los aspectos mencionados.
“El rechazo de la iglesia evangélica es por qué creemos que la unión en matrimonio de personas del mismo sexo, es violatoria de algunos mandamientos establecidos en el biblia. Las leyes deben ser congruentes con la palabra de Dios”, expuso Molina.
Para el 25 de febrero del próximo año se tiene planificado hacer una concentración en las plazas de los 22 departamentos del país.