Sin embargo, este año las cosas han sido diferentes. Las iglesias tomaron medidas especiales para poder cumplir con la tradición, pero evitando la propagación del coronavirus.
Por ejemplo, la Parroquia Nuestra Señora de la Merced instaló letreros que piden mantener el distanciamiento social. En la mayoría de iglesias se colocaron los Sagrarios en una puerta para que los fieles católicos puedan hacer la visita sin ingresar a los templos, evitando de esa manera aglomeraciones.
Visita de Sagrarios en la parroquia Nuestra Señora de la Merced la noche de Jueves Santo de 2021. pic.twitter.com/60pPP4ELS0
— Juan Manuel Vega (@JmVega_pl) April 2, 2021
Todas las personas que realizan el recorrido portaban mascarilla y la visita se realiza muy rápido. Antes de pasar por el lugar a los devotos se les toma la temperatura y se les aplica alcohol en gel en las manos. Cada cierto tiempo se hace una desinfección del área donde los visitantes transitan.
Este año la afluencia de personas es significativamente menor a los años anteriores debido a la ausencia de procesiones y la pandemia.
La tradición
La visita a los siete sagrarios es una forma de recibir indulgencias para hacerse perdonar los pecados. El siete tiene un significado sagrado y místico de perfección. Recuerda los siete lugares a donde fue llevado Jesús antes de ser crucificado.
Las iglesias que se visitan y el orden en que se hace es de elección de cada persona, así también como el rito que se realiza en cada templo. La visita a los sagrarios permite a los fieles la posibilidad de reducir las penas acumuladas por sus pecados, aunque se trata una cuestión de fe, ya que no existe una base en el derecho canónico que lo respalde.