De los 10 casos del Mineduc, ocho se encuentran clasificados por violación y tres reportaron un embarazo. Uno de los casos fue contra un niño de 3 años, cometido en Jalapa por un practicante. Entre los municipios se encuentran dos de Huehuetenango y uno de Retalhuleu, Chimaltenango, Jalapa, Quiché, Santa Rosa, Alta Verapaz, Jalapa y San Marcos.
En este año, la unidad reporta al menos tres casos solo en enero, pero todos se encuentran en investigación.
Se considera que podría haber más casos, ya que la Fiscalía de Niñez y Adolescencia del Ministerio Público (MP), la cual fue inaugurada en octubre pasado, conoce al menos ocho.
Norma Ramírez, fiscal adjunta de la Niñez y Adolescencia, comentó que solo del área metropolitana registran al menos ocho, entre ellos de colegios donde los denunciados ha sido maestros y directores.
De la Roca comentó que cuando un maestro es denunciado por violencia sexual se le traslada a un área administrativa o dirección departamental para separarlo de los niños, y si se encuentra en prisión preventiva se le recorta el salario. En el caso de que sea presupuestado se le destituye si ha recibido condena, ya que por estar sindicalizados el proceso es más complicado, mientras que si es por renglón 021 se le despide de inmediato.
La Defensoría de la Niñez y la Adolescencia de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) hizo una supervisión al Mineduc y sus sedes departamentales el año pasado, en la cual encontró que la Dirección General de Coordinación (Digecor) recibió del 2012 a octubre del 2016 41 denuncias de abuso sexual, 68 de acoso sexual y hostigamiento, 19 de violencia sexual, mil 27 de maltrato a niños y adolescentes en modalidad física o psicológica y 16 de racismo y discriminación. Estas han sido en el ámbito escolar, y puede ser entre pares —estudiantes— o de maestros y directores contra estudiantes.
Ramírez comentó que tiene un caso de un docente de Educación Física, de 38 años, quien supuestamente sedujo a una alumna de 14 años. Poco a poco la convenció, y en un hotel abusó de ella. Mientras se realiza la investigación, la menor dejó de estudiar y el maestro sigue impartiendo clases.
La fiscal refirió que en uno de los casos en donde el delito fue agresión sexual por parte del director de un colegio, a la niña la cambiaron de establecimiento, mientras este indicó que ella era una mentirosa. “Entonces en lugar de castigar al agresor se castiga a la víctima. Pero qué gana la niña con inventarse eso”, cuestionó la fiscal.
En este caso el informe final de la investigación se entregó el 22 de noviembre del 2016 y la audiencia se fijó para el 10 de noviembre del 2017. Ramírez lamentó esto, ya que el posible agresor sigue cerca de niños.
Casos reales
Adolescente de 14 años, Instituto público, seducida por un maestro de 38 años
Cuando me fue a dejar a la casa me intentó besar; yo no quería y le dije que eso no estaba bien, que era el profesor, pero cuando ya me iba a bajar me jaló y me besó, y yo no quería, no me gustaba, aparte yo solo había tenido un novio cuando estaba en sexto, pero nunca me besó como el profesor”, dijo.
Comentó que salieron dos veces más: la primera la llevó a un hotel, pero solo comieron, y la segunda pensó que iba a ser igual. “Yo le dije que no, y me dijo que no era la primera vez que lo hacía con una alumna, pero era la primera por la que el sentía lo que sentía”, indicó. Ese día la abusó tres veces.
Niña de 12 años, colegio, director la tocó varias veces
Después empezó a bajar su mano de mi cintura hasta llegar a tocarme aquí —los glúteos—, después quería que le diera un beso y abrazo. Le dije que sí, pero en la mejilla, y cuando le iba a dar el beso me puso su boca y me hice para atrás. El Director me dijo que me quería dar un beso en la boca y se me quedó viendo acá —a los pechos—; después se puso nervioso y dijo que era mentira”, indicó.
Niña de 13 años, colegio, la Directora sabía de los abusos
La niña relató que minutos después llegó la esposa del Director y al ver lo que pasaba cerró la puerta. Luego el docente sacó sus manos de la ropa de la menor y le pidió que se fuera; ella salió pero se escondió. “La Directora entró y él le dijo que el profesor de inglés me había tocado y que no se había podido resistir, que también me había tocado; ella le gritó que por qué lo había hecho y él no respondió”, indicó.