Idioma poderoso
Durante su discurso, Sandoval resaltó el amplio alcance de la lengua castellana, pero también los retos que afronta en territorio anglosajón. “La Anle enfrenta la realidad del español a lo largo y ancho de un territorio equivalente a todo México, Centroamérica, el Caribe, Argentina y Perú, y cuya población de origen hispanoparlante equivale a la totalidad de quienes nacieron en estos últimos dos países hermanos de idioma”, expuso.
Especificó que la evolución idiomática tiene un fuerte influjo de la forma de vida en EE. UU. “Existe una interrelación de las diversas maneras de hablarlo por quienes han emigrado de los países hispanoparlantes. Ellos traen consigo las peculiaridades lingüísticas propias de la ya cuatricentenaria mezcla del idioma llevado por España con los idiomas propios de América”, refirió.
Al final resaltó la expansión que ha tenido el español en medios masivos estadounidenses, lo cual a su vez representa un reto: hablarlo correctamente para que siga evolucionando sanamente. “La tarea de las academias de la lengua española de EE. UU, y de Guatemala se parecen. Deben tener éxito en la tarea de interesar a los hablantes en mantener o en crear el cariño al español y el orgullo de hablarlo”, afirmó.