Si fuese el caso, dijo que para ello enviaría una carta al Congreso de la República para solicitar que tome efecto su renuncia.
“Si de haber un antejuicio en mi contra o una investigación, pues no quiero ir al engorroso juicio político sino que de inmediato se haga uso de mi renuncia correspondiente, para someterme como una ciudadana común y como es debido en un estado de derecho”, afirmó Alfaro.
La magistrada se pronunció nuevamente al respecto, tras denunciar públicamente que era objeto de amenazas.
Amenazas
Minutos antes de que los centros de votación comenzaran a funcionar, el pasado domingo 20 de agosto, Alfaro habló por primera vez acerca de la posibilidad de que abandonara su cargo.
“Estoy haciendo una evaluación personal, voy a platicarlo con mi familia. Considero que mi función llega hasta esta elección. Para esto me eligieron y no renuncié antes porque era el momento de cumplir con el país y de terminar esta elección”, aseguró entonces.
“A partir del martes — 22 de agosto— estoy considerando poner a disposición del Congreso mi cargo y someterme a cualquier juicio que esté en investigación, como una ciudadana común y corriente”, agregó.
“Si las autoridades del Ministerio Público consideran que debo presentarme ante la justicia, lo voy a hacer y voy a renunciar, para que no tengan la necesidad de un antejuicio y puedan iniciar las acciones de inmediato”, declaró también.
El sábado 19 de agosto, previo a la segunda vuelta, la magistrada denunció mensajes amenazantes que recibió en un chat.
“Espero que no vaya a cometer el error de cometer el fraude porque si se lleva a cabo se le va acabar la carrera y nos vamos a ca…r en su persona y su familia”, se leía en uno de los mensajes que la funcionaria mostró a la prensa.
Alfaro no precisó si presentó alguna denuncia por ese hecho, pero dijo que el magistrado Gabriel Aguilera también ha recibido este tipo de mensajes.
Supuesto intento de soborno
En junio de este año, el medio estadounidense The New York Times publicó un artículo en el que expuso que la magistrada Alfaro supuestamente sostuvo una reunión en la embajada de los Estados Unidos, en la que denunció un intento de soborno por parte de Miguel Martínez, allegado al presidente Alejandro Giammattei.
Según la publicación, la magistrada mostró la cantidad de dinero que le habían ofrecido en efectivo, equivalente a Q50 mil. Sin embargo, la magistrada negó después que hubiese hecho esa acusación.