Justicia

“El Blacky” pandillero de la Mara Salvatrucha (MS13), acusado de múltiples asesinatos, se vuelve a fugar de El Boquerón

Francisco Javier García González, alias "el Blacky", escapó por segunda ocasión de la cárcel de máxima seguridad, El Boquerón, en Cuilapa, Santa Rosa. Es el séptimo que se fuga de una prisión guatemalteca.

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La fuga ocurrió en 2016 en la Cárcel de Máxima Seguridad El Boquerón, en Santa Rosa. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca)

La fuga ocurrió en 2016 en la Cárcel de Máxima Seguridad El Boquerón, en Santa Rosa. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca)

Francisco Javier García González, alias Blacky, líder de la clica Parkin Locos de la Mara Salvatrucha (MS13), volvió a escapar de la cárcel de máxima seguridad El Boquerón, ubicada en Cuilapa, Santa Rosa, confirmaron fuentes del Ministerio de Gobernación (Mingob).

La fuga de García González ocurrió el sábado 8 de octubre pasado cuando fue trasladado al centro de salud de Cuilapa, Santa Rosa, por orden de un juez y con carácter de urgente, a una cita médica junto con el agente del centro carcelario, coordinador de trasiegos, Luis Miguel Ramos Jiménez.

La información confirmada por las autoridades del Sistema Penitenciario (SP) es que Ramos Jiménez, custodio del líder de esa clica de la MS13, se presentó a laborar el domingo 9 de octubre a las 13 horas y les aseguró a sus superiores que García González “lo había invitado a una gaseosa que tenía alguna sustancia al salir del centro de salud, razón por la cual perdió el conocimiento y el recluso aprovechó para fugarse”.

Este caso es similar al del recluso Miguel Ángel Cáceres Cuy, de 32 años, arrestado por la Policía Nacional Civil (PNC) el 29 de marzo de 2022 en el puerto San José, Escuintla y que se fugó de la cárcel de Chimaltenango el 25 de septiembre pasado.

Cáceres Cuy aprovechó cuando fue a una cita médica al Hospital Roosevelt en la Ciudad de Guatemala. Ese día lo custodiaron los agentes del SP Darío de Jesús Álvarez Ramírez, de 36 años y Héctor Cojom Ixim, de 26.

Lo guardias explicaron a las autoridades que habían aceptado regresar a la prisión chimalteca en un vehículo particular, aparentemente propiedad de un familiar de Cáceres Cuy y en el “trayecto les obsequiaron una gaseosa que contenía alguna sustancia que los dejó inconscientes”.

132 años de prisión

Francisco Javier García González, fue acusado en 2015 del femicidio de Nancy Paola Campos Minera, de 25 años, el 8 de febrero de 2011. y cuyo cuerpo apareció dentro de una bolsa en la zona 6 de la capital.

No obstante, por el caso que fue condenado García González a 132 años de prisión inconmutables fue por el que ocurrió frente a la sede de la Unidad Nacional de Atención al Enfermo Renal Crónico (Unaerc), en la zona 1 de la ciudad de Guatemala, el 26 de agosto de 2016.

El Blacky, junto con otras 16 personas, fue sentenciado por asesinato en agravio de cuatro personas, lesiones graves en perjuicio de tres y asociación ilícita. Según el MP producto del ataque, un integrante de la pandilla Barrio 18  murió y resultaron heridas varias personas ajenas al hecho.

Francisco Javier García Gonzales, alias “el Blaky”, volvió a fugarse de la cárcel de máxima seguridad, El Boquerón, en Cuilapa, Santa Rosa. Se evadió el 8 de octubre pasado. Foto Sistema Penitenciario.

Las investigaciones de la fiscalía determinaron que los 17 condenados participaron en tres hechos más ocurridos el 9, 10 y 11 de septiembre de 2016.

“Uno de estos se concretó cuando atacaron al azar a personas que acudieron a un sepelio, usando para su propósito armas de uso exclusivo del Ejército. En otro hecho, atacaron a un piloto de transporte. Y en uno más atacaron a otra persona en la zona 5 de la capital”, refiere el MP.

El ministro de Gobernación, David Napoleón Barrientos, confirmó la fuga y aseguró que desde hace meses han iniciado con las pesquisas contra autoridades de las prisiones en donde han ocurrido las fugas y determinar si ha habido corrupción de trabajadores de presidios para permitir las evasiones.

Carlos Morales, vocero del SP, informó que este caso se suma a los otros seis que han ocurrido en diversas prisiones del país y todos están bajo investigación de la Inspectoría del SP. Los guardias señalados están bajo investigación.

Hasta ahora se desconocen si el Ministerio Público (MP) ha iniciado alguna pesquisas, tomando en cuenta que algunos de los reos fugados purgaban penas que había conseguido el ente investigador.

La primera vez que García González escapó de esta prisión fue el 17 de junio de 2016. Aquella vez el Blacky se fugó junto con Rudy Francisco Quiroa, presunto asesino serial de la zona 1 capitalina que fue recapturado en el 26 de junio de 2017.

Ambos eran requeridos por el Tribunal de Mayor Riesgo A, en la capital por haber cometido y planificado múltiples asesinatos, cada quien con su modus operandi definido.

Sin embargo, en los registros actuales del SP aparece que García González ingresó a El Boquerón el 3 de mayo de 2018 acusado de portación ilegal de armas de fuego, armas químicas y biológicas, entre otros delitos.

El 10 de octubre pasado fue destituido del cargo como subdirector general de Presidios, Alejandro Chang Jiménez, quien según fuentes internas del SP, ha sido cuestionado por las evasiones y asesinatos que han ocurrido en las prisiones de la República.

Sin embargo, el titular de la cartera del Interior, aseguró que era un cambio normal, y de reestructuración para ordenar el SP. Hasta ahora se desconoce quien ocupará el puesto, pero Barrientos expresó que será el director de Presidios, Joaquín Flores, quien se encargue de eso, porque “hasta ahora ha hecho un buen trabajo mejorar las cosas dentro de las cárceles guatemaltecas”.

Aclaración: 

El 13 de diciembre de 2023, mediante una carta enviada a Prensa Libre , el señor Alejandro Chang Jiménez, solicitó que se rectificara la mención que se hace en la nota sobre él, pues según explica en la parte de conducente de su carta:

– “los Subdirectores Generales del SP se les delega la responsabilidad administrativa de la institución y el Director General el área operativa… Dicho sea de paso, no tuve ningún hallazgo por la Contraloría”.

–  “Cuando fungí un mes y medio como Director General por ausencia del puesto, me dediqué a sacar celulares en las cárceles.  Al ver las estadísticas, comprenderá que no me hice de amigos en el SP, no seguí “la línea” de lo que acostumbran hacer y por ello, cierto personal obscuro hablaba mal de mí, así como el netcenter de los reclusos. Me parece injusto que personas impresentables salen de las gestiones en caballo blanco y yo, que hasta tuve serias amenazas, un medio formal le hace eco a “fuentes internas” que solo se han dedicado a ayudar al crimen organizado”.

– Adjunta estadísticas de su gestión: