Samayoa: Lo que pasa es que estamos hartos de esperar que alguien más nos venga a salvar. Yo creo que lo que hicieron la Cicig y el MP llegó a ponernos a la ciudadanía a la posición de “bueno, hasta aquí podemos llegar”. Pero si nos quedábamos hartos de la corrupción y no más, nada iba a cambiar. Yo creo que se dio un despertar ciudadano, que no es un despertar nuevo, sino que se ha venido acumulando de varios años. Lo que pasó en abril es que ahora vamos a ejercer nuestro rol, y ahora nos tocaba a nosotros poner la presión.
Mack: Hay nuevas generaciones que vienen. Los jóvenes lo han dicho: se metieron con la generación equivocada, y lo que sucede es que es una generación que está más informada y que tiene pensamiento crítico. Los jóvenes de ahora tienen mejores oportunidades de estudio y especializaciones que la generación nuestra, y eso hace que no tan fácilmente se la puedan creer. El descaro con el que este gobierno manejó todos los temas de la corrupción fue por lo que dijeron ¡basta! No solo estamos cansados de la corrupción, sino de la violencia; por eso, cada sector manifestó cómo la corrupción les afecta. Esa prepotencia y arrogancia al más alto nivel. Primero empezamos con regalar motos, después caballos, pero después fueron yates, fincas y hasta llegar al helicóptero. Eso era un descaro.
Varias entidades acuerparon al procurador de los Derechos Humanos. ¿Ya se había dado antes o es primera vez que se acuerpa al PDH?
Mack: En distintos espacios se ha consensuado agenda mínima; y yo diría que ya ni agendas, sino acciones mínimas, donde podamos estar todos de acuerdo, y son acciones anticorrupción, que es el denominador común que nos está uniendo a todos, porque en corrupción no hay ideologías, como en la justicia tampoco hay ideologías. A partir de eso se hace un piso, y empezamos a colocar cuáles son las acciones consensuadas, y se ha estado haciendo.
Samayoa: Esa imagen representa cómo el guatemalteco reacciona en redes sociales, como Twitter y Facebook, de que no podemos estar sentados, llegando al tejido social. Esta misma foto con su misma expresión la hemos visto en Huehuetenango, Quetzaltenango y Cobán, como expresiones de haber estado enfrentados. Al final, caemos en la cuenta de que mucho de lo que nos enfrenta es la corrupción.
¿Cómo describen ustedes las recientes protestas?
Mack: Yo la describiría en que hay un cansancio de la violencia, que esa cultura de paz se dio en este momento cívico. En el tema de la Policía, siempre decía que no debe ser represiva, sino más bien preventiva, y no seguir la doctrina militar. Y en este momento se dio el cambio, al ver a las personas dándole agua a los policías y tapándolos para que no se mojaran.
El policía también es pueblo, y es darles a entender que el pueblo no son sus enemigos. Hago un reconocimiento a todos los colectivos que ayudaron con esto, con esa creatividad de hacer cadena humana, era un mecanismo de neutralizar a grupos afines del presidente con ese llamado a “la Guatemala profunda”.
Samayoa: Yo diría de reinvención de varios grupos, de cómo los encapuchados, que han sido estigmatizados, también se reinventan y son de los grandes promotores de las acciones positivas hacía la policía, y eso es lo que hay que reconocer. Cómo esos grupos que no supieron entender que este es el momento del cambio, como Joviel Acevedo, Luis Lara y Nery Barrios, como también los políticos en general, están quedando fuera de la historia. Por eso estamos alegres, estamos reinventando qué somos los guatemaltecos.
¿Cuál es el próximo paso de las movilizaciones?
Mack: Desde el primer momento se pusieron los puntos sobre la mesa, que era manifestar el descontento con este gobierno, pero también es importante que se aprueben la Ley Electoral, reformas en Contrataciones y el tema de la Ley de Servicio Civil.
Samayoa: Lo que se plantea es consenso y procurar otras leyes, como la de desarrollo rural, y no inventaremos nada porque están las propuestas, están los consensos. Son reformas que deberíamos de construir después del 6 de septiembre.
¿Todo el despertar ciudadano se traducirá en las urnas?
Mack: No. El tema de las elecciones es solo un mecanismo. Aquí no se escuchó un debate político, pero sí habrá más fiscalización para el próximo gobierno.
Samayoa: Son elecciones con menor debate político. Las propuestas siguen siendo lo mismo, son propuestas que se han escuchado con candidatos pasados; pero sí hay más ciudadanía que empieza a pensar, y por eso tenemos más violencia electoral en la provincia, porque los poderes locales se dan cuenta de que no lo tienen tan fácil.