Otro de los testigos presentes fue Adán Pérez, dijo que su hijo Rubelio García murió en la masacre perpetrada “en la finca de Otto Salguero”, a quien supuestamente buscaban vengar los delincuentes.
También se presentó el testimonio de una mujer que fue amiga de Edwin Sis, supuesto Zeta, quien es juzgado por la matanza.
Durante la audiencia de este día se escuchó el testimonio de una testigo protegido, identificada solo como Sofía, quien relató que su esposo, un vendedor de vehículos, fue secuestrado por el grupo armado de Los Zetas, en Huehuetenango, y como rescate exigieron tres vehículos, uno de los cuales que era un picop, fue hallado durante el estado de Sitio en el parcelamiento La Mula, La Libertad, en Petén.
El secuestro fue perpetrado el 27 de octubre del 2010, en el trayecto de Huehuetenango hacia el municipio de Chiantla.
En horas de la mañana el Ministerio Público presentó al Tribunal 24 fusiles que fueron incautados a los Zetas, acusados de la matanza.
Las armas fueron localizadas enterradas en la finca La Mula, lugar que colinda con la finca en donde fue perpetrada la masacre de los jornaleros.
Las pruebas balísticas coinciden con uno de los proyectiles encontrados en uno de los cadáveres de los campesinos asesinados.
La matanza ocurrió la noche del 14 de mayo de 2011 en la finca Los Cocos, La Libertad Petén, allí murieron 27 campesinos y con su sangre escribieron en un muro: Vamos por tu cabeza Otto Salguero.
Por este caso enfrentan juicio Hugo Álvaro Gómez Vásquez, aliasComandante Bruja; Luswin Alberto Celada Galdámez, Comandante Lombriz; Luis Gustavo Adolfo Cal Bol, Edwin Otoniel Sis de León, Germán Icó Che y Élder Estuardo Morales Madrid, acusados de plagio o secuestro, asesinato y asociación ilícita.
También son procesados los mexicanos Jorge Hernández Méndez, Josué Daniel Castillo Gaspar y José Luis Santiago Morales.
El Ministerio Público sostiene que se trató de una venganza por el robo de dinero y droga que pertenecían a la estructura dirigida por Z200.
Durante el segundo día del juicio, la Fiscalía presentó la grabación de la declaración de un testigo eficaz quien aseguró que alertó a la Policía Nacional Civil sobre la matanza, pero no tuvo eco.
Con información de Jerson Ramos
