Esta protesta se realizó días después de que la jueza Claudette Domínguez ligara a proceso penal a 11 de los 14 militares retirados acusados de desapariciones forzadas y delitos de lesa humanidad por al menos 558 desapariciones de indígenas durante el conflicto armado interno (1960-1996).
La jueza decidió otorgar “falta de mérito” al caso de los otros tres militares por supuestas “incongruencias” en las fechas cuando el Ministerio Público (MP, Fiscalía) realizó la acusación, aunque el ente público tiene ahora tres meses para enmendar la investigación.
Según la acusación, los 14 militares participaron de forma “sistemática” en delitos y matanzas que se pueden considerar “crímenes de guerra”, así como en violaciones múltiples a mujeres y menores de edad durante la década de los 80.
Este caso, conocido como Creompaz debido a que las osamentas fueron localizadas en el Comando Regional de Entrenamiento de Operaciones de Mantenimiento de Paz (Creompaz), en la antigua Zona Militar 21 de Cobán, Alta Verapaz, ha vuelto a traer a la memoria de los guatemaltecos el drama vivido durante los 36 años de guerra.
Ligados a proceso
Los 11 militares retirados ligados a proceso son el general Manuel Benedicto Lucas García y los oficiales José Antonio Vásquez García, Carlos Augusto Garavito Morán, Raúl Dehesa Oliva, Gustavo Alonzo Rosales García, César Augusto Cabrera Mejía, Ismael Segura Abularach y Juan Ovalle Salazar.
Además de Byron Humberto Barrientos Díaz, César Augusto Ruiz Morales y Luis Alberto Paredes Nájera.
Los procesados se encuentran en prisión preventiva en la cárcel de la brigada militar Mariscal Zavala.
Por este mismo caso, una abogada guatemalteca solicitó la apertura de antejuicio contra el ministro de Defensa, Williams Mansilla, por haber revelado “sin orden judicial” documentación clasificada como “secreto militar”.