Guatemala

Salvador González, alias Eco, se siente en “peligro”

El empresario Salvador Estuardo González Álvarez, testigo clave en el caso de corrupción aduanera La Línea que mantiene en prisión preventiva al expresidente Otto Pérez Molina y a la ex vicepresidenta Roxana Baldetti, aseguró hoy sentirse en “peligro”  pero liberado por haber “dicho la verdad”.

“No quiero que me pase nada y menos a mi familia”, dijo Salvador González al terminar la audiencia. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

“No quiero que me pase nada y menos a mi familia”, dijo Salvador González al terminar la audiencia. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

“Se trató de botar (rechazar) mi declaración, pero la verdad es lo que yo dije”, dijo González Álvarez a los periodistas tras concluir una audiencia de declaración de “prueba anticipada”.

Durante cuatro días de declaración, Eco, como se conoce al empresario, ratificó que Pérez Molina y Baldetti eran el número 1 y la 2 de la estructura criminal.

También ha sostenido que Pérez Molina y Baldetti, que se vieron obligados a renunciar a sus cargos por el escándalo de corrupción, recibían el 50 por ciento de los sobornos que cobraba La Línea en al menos tres aduanas  (Santo Tomás, en Izabal; La Central, en la capital, y Puerto Quetzal, en el Pacífico).

El empresario no ha aclarado ni cuánto dinero percibió él de la trama de corrupción ni el importe que fue a parar a manos de los exmandatarios, a cuyas órdenes aseguró trabajar.

En su intervención ante los medios, Eco  volvió a disculparse ante la sociedad por haber participado en el fraude, al tiempo que afirmó sentirse liberado tras haber contado lo ocurrido porque “la verdad os hará libres”.

El testigo, clave para sostener las acusaciones del Ministerio Público, reconoció que las medidas de seguridad a su alrededor han mejorado, pero aun así teme que se produzcan nuevas amenazas a su familia, que ya tuvo que salir del país por este motivo.

“No quiero que me pase nada y menos a mi familia”, remarcó antes de ser trasladado a prisión, donde permanece en un módulo aislado.

González, de acuerdo con las investigaciones, era el supuesto jefe externo de La Línea, y en su primera declaración dijo que participó en la coordinación de la estrategia para defraudar al Estado junto con Juan Carlos Monzón, el ex secretario privado de Baldetti.

Monzón, quien busca también convertirse en un “colaborador eficaz”  de la Fiscalía, respaldó ayer miércoles ante el juez del caso el testimonio de Eco.

Durante esta última jornada de declaración, el empresario se enfrentó a las duras preguntas de la defensa de la exintendente de Aduanas Claudia Méndez, en prisión preventiva por la trama, quien puso en duda la veracidad del testigo.

El empresario había afirmado anteriormente que Méndez había recibido en una ocasión una caja con dinero en efectivo como “regalo”  de la estructura criminal.

El titular del Juzgado B de Mayor Riesgo, Miguel Ángel Gálvez, fijó para el próximo 28 de marzo la vista en la que se decidirá si Pérez Molina y Baldetti van o no a juicio por defraudación aduanera.

Durante esa audiencia de “etapa intermedia”, el juez deberá valorar si las pruebas presentadas por la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci) del MP son suficientes para enviar a un debate oral y público a los dos ex altos funcionarios.

El expresidente se encuentra en prisión preventiva desde el pasado septiembre acusado de los delitos de asociación ilícita, cohecho activo y caso especial de defraudación aduanera.

Los mismos delitos se le imputan a la exvicepresidenta, arrestada en agosto del 2015.

“La Línea”  fue desarticulada el 16 de abril del año pasado por las autoridades con el apoyo de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala.

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