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En esas sesiones pendientes debe discutir el Proyecto de Presupuesto 2021, y si el tiempo y consensos lo permiten, elegir a la próxima junta directiva (2021-2022).
Las nuevas autoridades del Congreso asumirán el 14 de enero próximo y están en juego la presidencia, tres vicepresidencias y cinco secretarías. La junta directiva es la que convoca a las plenarias, define la propuesta de agenda a discutir y tiene el control financiero de ese organismo.
Los partidos políticos que actualmente ocupan la directiva son Vamos por una Guatemala Diferente (Vamos), Unión del Cambio Nacional (UCN), Valor, Visión con Valores (Viva), Todos, Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), Partido Humanista, Prosperidad Ciudadana (PU) y Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
Los partidos de oposición, que incluye la fracción mayoritaria de la UNE, Movimiento Semilla, Winaq, URNG-Maíz; Compromiso, Renovación y Orden (Creo); Victoria, y algunos diputados de Bienestar Nacional (Bien), Partido Humanista e independientes discuten la posibilidad de proponer una planilla que le quite el control del Legislativo al oficialismo y sus bancadas aliadas.
Acuerdos espurios
La oposición afirma que el trabajo de la actual junta directiva ha sido frenar la elección de magistrados para el Organismo Judicial, lo que ha obstaculizado otros puntos de la agenda, por lo que espera conseguir acuerdos para renovar esa instancia parlamentaria.
“Todos sabemos de las reuniones en Santo Tomás —de Castilla—, donde el presidente —Alejandro Giammattei— dirige a este grupo de diputados, y es otra vez en Santo Tomás en donde buscará el apoyo para la reelección de Allan Rodríguez. Sabemos que Rodríguez le pide a Giammattei que le arregle los votos para ser reelecto, a cambio de obras, plazas y componendas de tipo espurio”, señaló el diputado Carlos Barreda, jefe de bloque de la UNE.
El congresista descartó que un diputado del bloque verde se postule a la presidencia del Legislativo, para que sea aceptado por la mayor cantidad de parlamentarios.
Se intentó obtener la opinión del actual presidente del Congreso, pero no atendió las llamadas. Sin embargo, el jefe del bloque oficial, Mynor Mejía, respondió en mensajes que su bancada aún no decide si buscará dirigir ese organismo.
Al preguntarle sobre si Rodríguez buscaría su reelección, Mejía dijo que, si eso ocurre, el diputado contará con todo el apoyo de su bancada. Vamos tiene 17 legisladores.
El nombre de la diputada Sofía Hernández es el que más suena en la UCN para ocupar el cargo, pero el congresista Julio Lainfiesta asegura que el tema no se ha abordado en el bloque.
Lainfiesta añadió que buscarán un puesto en la próxima directiva para impulsar proyectos de interés nacional. “Creo que la junta directiva actual tiene un representante, son nueve partidos, eso da pluralidad y representatividad. En la octava legislatura, UCN apoyó en los cuatro años, ahora que somos 12 diputados en la bancada, estoy seguro de que los partidos afines nos tomarán en cuenta; se sienten cómodos con nuestra representatividad”, dijo.
El partido Viva explicó de forma breve que no buscan la presidencia y descartó que Aníbal Rojas se postule, pese a que su nombre suena en los pasillos del Congreso.
No fue posible contactar al diputado Arzú Escobar para conocer si tiene intención de presidir el Congreso.
El legislador Rodolfo Neutze, jefe de Creo, admitió que algunos diputados le manifestaron su confianza para dirigir el Parlamento el próximo año, aunque no se ha decidido.
Independientemente de quién encabece la próxima legislatura, Neutze afirmó que es crucial la búsqueda de acuerdos para un trabajo efectivo. “La directiva debe ser propositiva. No podemos hablar de una junta que solo ve intereses del oficialismo o los de la oposición. Quisiéramos que prevalezca el interés del Ejecutivo y Legislativo por servir a los guatemaltecos”, enfatizó.
Principal reto
La próxima junta directiva del Congreso debe alcanzar acuerdos políticos que permitan afinar una propuesta de agenda que no se estanque, en la que tendrá un papel clave la elección de magistrados judiciales.
“Hay aspectos urgentes a nivel nacional que debe resolver el Congreso, como la elección de magistrados. Se generaron algunas diferencias con la Corte de Constitucionalidad, pero definitivamente hay un cuestionamiento de la sociedad al no integrarse. En una república debe garantizarse la certeza jurídica y la independencia judicial”, señaló Geidy de Mata, directora del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac).
Para Fernando Ixpanel, de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), el diálogo que promuevan las próximas autoridades es vital. “Lo que podemos evidenciar en este momento es que hay posturas muy distintas que han llevado a lo que fue una mesa de diálogo, que ni terminó de ser instaurada por las diferencias entre las bancadas. Lo que sucede es que no se ponen de acuerdo en lo más mínimo. La próxima junta directiva tiene ese reto, definir una agenda e incluir la elección de magistrados”, dijo.