Política

Se pone en duda la nominación presidencial de Manuel Conde por la alianza Vamos-PAN

El partido Vamos aplazó por tiempo indefinido su asamblea de proclamación de candidato y fuentes del partido sugieren que Manuel Conde ya no es el favorito para correr por la presidencia.

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Manuel Conde

Manuel Conde participa el cierre de una gira de capacitación política del partido Vamos, en agosto pasado. (Foto Prensa Libre: Facebook del Partido Vamos)

Mientras las agrupaciones políticas nominan y definen a sus eventuales presidenciables para la contienda política que se avecina, el partido oficial aún analiza quién competirá por el relevo de Alejandro Giammattei.

El Comité Ejecutivo de Vamos prorrogó la fecha de proclamación de binomio presidencial, en tanto que prefiere no adelantar criterios sobre la posible candidatura de Manuel Conde, actual secretario general del Partido de Avanzada Nacional (PAN).

“No es el momento. Cuando lo sea, con todo gusto”, respondió el diputado Manuel Conde, mientras degustaba fruta en el pleno del Congreso y saludaba a los alcaldes que asistieron a la sesión plenaria, la semana pasada, para presenciar la aprobación del presupuesto del 2023.

El congresista, de 66 años y actual secretario general del PAN, prefirió no hablar sobre la alianza que mantiene con el oficialismo y menos de la oferta que mantiene con Vamos de ser la figura presidencial para los comicios del próximo año.

Conde comenzó a acercarse al presidente Alejandro Giammattei a principios de la actual administración presidencial, incluso en una de las primeras reuniones de jefes de bloques se ofreció para ser el enlace entre el Ejecutivo y el Legislativo, ante la falta de operadores para el partido Vamos al inicio de gestión.

El oficialismo encontró en ese entonces un congreso fragmentado, con 19 partidos, con lo que Conde y sus habilidades de negociador y moderador fueron su carta de presentación.

Víctor Valenzuela, secretario general de Vamos, reconoce que el diputado es “aliado estratégico y una figura importante dentro del partido”, pero tampoco quiso adelantarse a lo que sucederá en la asamblea nacional de proclamación del binomio presidencial, que ya no será el 27 de noviembre, sino que se solicitará al Tribunal Supremo Electoral (TSE) una nueva fecha. Por ahora no está definido un día.

“Una alianza o coalición está en el punto de agenda”, reiteró Valenzuela, al indicar que sí existen acercamientos con varias organizaciones políticas, aunque sin mencionar si entre ellas figura el PAN.

Conde reiteró que hablará al respecto en el momento oportuno. En tanto, circulan fotos de banderines en los cuales se lee: “Meme presidente”. Valenzuela señaló que puede tratarse de un montaje, pues en ninguna de las fotografías se ve a Conde.

Aunque este diputado sigue asistiendo a todas las giras de afiliación de Vamos, para algunos legisladores existe preocupación porque en las encuestas internas los números no suben a su favor. Incluso a semanas de la Asamblea Nacional se menciona que podría figurar otro candidato.

“En el ejercicio del poder está posicionado, pero en las encuestas no sube”, resumió Francisco Quezada, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), quien agregó que su alianza con el oficialismo le crea rechazo y que, sumado a ello, la gente no lo reconoce, por lo que sus posibilidades son mínimas.

Varios diputados indicaron que Conde busca su jubilación política y “qué mejor manera que hacerlo ahora, como una figura presidencial”.

Conde dio sus primeros pasos políticos como secretario general durante el gobierno de Jorge Serrano Elías, para luego ascender a secretario de Asuntos Específicos de la Presidencia. También fue vocero presidencial y el primer presidente de la Comisión de Paz del Gobierno de la República.

Control del PAN y a un paso de Vamos

Su paso por la agenda de la Paz le valió a Manuel Conde para tener como aliados cercanos a la cúpula militar y durante varios años fue consultor internacional para la paz de Colombia.
En 2007 participó en las elecciones como candidato presidencial con el partido Unión Democrática. Reapareció en el 2015, junto con Sandra Mayorga, e inició pláticas internas con Juan Guillermo Gutiérrez, ex secretario general del PAN y excandidato a la Presidencia.

Para esas elecciones, el PAN ganó tres diputaciones —Manuel Conde, Fernando Linares y Eduardo Zachrisson—. Cuatro años después ganaron dos espacios en el Legislativo, pero también Conde tomó control del Comité Ejecutivo y de todos los espacios en el Congreso, junto con Mayorga y su hijo Franklin Smile Flores Mayorga.

Ya con un nuevo comité ejecutivo y apoyo de Vamos, Conde se quedó como único representante del PAN en el Congreso y ha sido reconocido en las tres últimas directivas como jefe de bloque.

Además ha ocupado la presidencia de la Comisión de Relaciones Exteriores, y con él Mayorga, que ha sido su asesora personal contratada por el Legislativo.

Flores Mayorga fue nombrado en el 2019 primer secretario y cónsul de la Embajada de Guatemala en el Estado de Israel.

Desde marzo del presente año, Giammattei ha promocionado a Conde en sus giras, en inauguración de obras y entrega de proyectos.

Un candidato con recursos

Quezada expuso que Conde no es un personaje confrontador y no radicaliza su función en el Congreso. “Esto le ha permitido trabajar con el oficialismo y ha obtenido ventajas”, comentó.

Agregó que su alianza con Vamos es estratégica porque le permitirá tener dos partidos políticos; si le falla uno tendrá el otro para continuar su carrera.

“En este contexto, la posibilidad de ser candidato del oficialismo suele ser un factor que afecte en lugar de que beneficie, y eso ha sido histórico. Pero tal como están las cosas, esto puede cambiar”, indicó Jahir Dabroy, analista político de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), al manifestar que actualmente el Tribunal Supremo Electoral ocupa un papel relevante en cuanto a definir inscripciones.

Tanto Quezada como Dabroy coinciden en que Conde tiene la estructura a su favor y, más que ello, los recursos para mover piezas y quitar candidatos que no lo dejen crecer.