En un mensaje a la población, el mandatario informó que, debido al alza de casos de coronavirus en el país, se decretaban nuevas restricciones en el país, entre ellas el estado de Calamidad.
Sin embargo, Castillo explicó que fueron convocados este mismo viernes a sesión de Consejos de Ministros para requerir la aprobación de un estado de Calamidad, pero que votó en contra.
“Ha sido una preocupación de mi parte privilegiar la salud y la vida de los guatemaltecos. Mi voto fue en contra de dicha disposición”, expresa Castillo.
Agregó que las disposiciones decretadas hoy fueron conocidas mediante lectura “sin dar tiempo a que se realizara un análisis de las mimas y conocer sus implicaciones y efectos”.
“En consecuencia, no podemos avalar normativas que se desconocen a profundidad; prueba de ellos las diversas interrogantes que fueron expuestas durante la sesión”, agregó.
El vicepresidente explica en el texto que en otras ocasiones ha manifestado que “no es necesario decretar regulaciones como las establecidas en la Ley del Orden Público, para definir restricciones que pueden ser aprobadas a nivel presidencial o por el Ministerio de Salud”.
Dijo que las medidas como un estado de Calamidad conllevan a la limitación de una serie de garantías constitucionales, que incluso pueden ser “utilizadas en forma indebida para otros propósitos”.
Criticó que de marzo de 2020 a la fecha se han decretado estados de Prevención, de Sitio y de Calamidad “sin que ello advierta una mejoría en la contención de la pandemia o la adecuada y oportuna dotación de más hospitales, insumos, equipos y vacunación masiva para la población.
Castillo también hace referencia al cuestionamiento que se ha hecho de los mecanismos en que se adquirió la vacuna rusa Sputnik V, lo que califica como una “errática gestión del manejo de la pandemia”.
Enfatizó que la forma de mitigar los efectos de la pandemia “no es restringiendo garantías”, sino por medio del masivo proceso de vacunación a toda la población. Criticó que la mayoría de vacunas con que el país ha contado hasta hoy se haya obtenido gracias a donaciones.
Castillo finaliza la misiva diciendo que solicitó que el presidente ordene inmediatamente la cancelación de todas las compras y preparativos para conmemoración del Bicentenario en el país.
“Las condiciones económicas, sociales y sanitarias del país en este momento no privilegian que el Gobierno distraiga atención y recursos en la celebración del mismo”.
