Uno de los centros más antiguos, no sólo de Guatemala sino de toda Centroamérica, es el colegio San José de los Infantes, fundado en 1781 por monseñor Cayetano Francos y Monroy. Desde su creación fue concebido para estar ligado a la Catedral Metropolitana.
Durante mucho tiempo ha sido un semillero de acólitos y sacerdotes, aunque también hay egresados en las más diversas profesiones, sin embargo, por la enseñanza religiosa y sus actividades relacionadas con la Iglesia Católica, muchos jóvenes han encontrado allí su vocación mística.
El Infantes comenzó con el método “lancasteriano”, en donde el maestro preparaba monitores para que éstos pudieran enseñar a otros.
La unidad entre el colegio y la Catedral es tal que la máxima autoridad es el Arzobispo, quien nombra al director del plantel por el tiempo que considere conveniente. Tal unidad se ha mantenido pese a la distancia que los separa ahora, ya que la sede del colegio se encuentra actualmente en la colonia El Rosario, Mixco, por razones de espacio. En el antiguo edificio de la zona 1, sólo podían impartir clases a 400 alumnos, mientras ahora tienen mil 500.
A principios del siglo XX también surgieron centros educativos privados exclusivos para mujeres. En 1905 se funda el colegio La Concepción, conocido desde 1923 como Sagrado Corazón.
Este establecimiento, pese al crecimiento de su población estudiantil, continúa en el mismo edificio de la zona 1 en donde empezó. El lugar es de fácil acceso para muchos padres de familia.
Hace más de cien años no sólo fueron creados establecimientos religiosos católicos. También aparecieron los protestantes aunque en menor cantidad. El colegio La Patria empezó con el nombre de Americano, después pasó a ser el Industrial y desde 1912 se le conoce con el nombre actual.
Este centro tiene una historia peculiar, ya que fue abierto bajo la protección del entonces presidente Justo Rufino Barrios (1873-1885), quien prestó una propiedad para el funcionamiento del colegio en la zona 1.
El establecimiento presbiteriano en su primera época tuvo sólo alumnado femenino, después pasó a ser de varones, pero desde 1937 hasta la fecha ha funcionado como mixto.
Formación reconocida
Los centros de enseñanza privados con años de trayectoria continúan proporcionando educación pese al surgimiento de cientos de nuevos establecimientos.
La mayoría de colegios antiguos son considerados conservadores y prácticamente un patrimonio de la sociedad guatemalteca, pero esa antigüedad no los hace ser obsoletos, pues están actualizándose constantemente.