El cajón no está cerrado y se puede ver el cuerpo del difunto, incluso cuando lo van bajando hacía el lugar en el que lo enterrarán.
BBC NEWS MUNDO
“El entierro de Pachencho”: así es como los cubanos se burlan de la muerte
La viuda desconsolada llora a su esposo mientras sus vecinos la acompañan en la procesión que lleva el ataúd hacia el cementerio.
Pero ¡un momento! Al muerto se le ve parpadear. ¿Qué pasa?
Le empiezan a dar ron y el muerto deja de estar muerto y saca la lengua.
Así comienza la fiesta, en la que a la esposa se le ve bailar con el cura.
Todos son actores.
Se trata de una tradición que se acerca a las tres décadas y que se le conoce como el “El entierro de Pachencho”.
Los habitantes de la ciudad de Santiago de Las Vegas, en la provincia de La Habana, la celebran cada 5 de febrero y un vecino es el encargado de encarnar a Pachencho.
Un artículo de Radio Rebelde cuenta que hay varias versiones sobre los orígenes de esta tradición: unos dicen que nació como una forma de conmemorar la fundación, en 1882, del Centro de Instrucción y Recreo, que es una institución cultural y educativa.
Otra versión apunta al año de 1937 cuando se creó el grupo musical Piquete Santiaguero, que se encargaba de cerrar las fiestas de esa localidad y del “Entierro del Carnaval”.
Y una más la remonta a los años 70 cuando se presentaba la obra teatral “El velorio de Pachencho”.
Aunque no hay certeza del origen, lo cierto es que la tradición sigue viva y coleando.