“No ha sido flagelado” este viernes, declaró su esposa Ensaf Haidar, refugiada en Canadá junto con sus hijos. Aunque no entró en detalles.
La víspera dijo a AFP que estaba preocupada por la salud de su marido, que sufre de hipertensión desde su detención en 2012. “El estado de salud de Raif es malo y empeora“, afirmó.
La segunda vez que se postergó la flagelación, su esposa y Amnistía Internacional (AI) afirmaron que las heridas de los primeros latigazos no habían cicatrizado lo suficiente.
Encarcelado en 2012, Badawi era uno de los responsables de la página internet Liberal Saudi Network y en 2014 recibió el premio Reporteros sin Fronteras (RSF).
Arabia Saudita, cuna del wahabismo (una versión rigurosa del islam),es un reino ultraconservador.