El reglamento estipula que después de cada partido, los árbitros tienen que regresar a sus hoteles con sus asistentes.
Clattenburg también incumplió con el reglamento al hablar por teléfono con el técnico de Palace, Neil Warnock, después del empate 2-2.
Los árbitros sólo pueden hablar con los entrenadores 30 minutos después de los partidos, y sus asistentes tienen que estar presentes en caso de tengan que verificar la conversación