“No podríamos estar más felices”, dijo el príncipe Guillermo sobre el nacimiento de su hijo, en un breve comunicado.
El anuncio del feliz acontecimiento inundó de inmediato las redes sociales y fue recibido con aplausos por parte de los turistas agolpados frente a las pesadas puertas enrejadas del palacio.
El niño “nació con buena salud” a las 16.24 horas de Londres en el hospital St. Mary de Londres. “El bebé pesó 8 libras y 6 onzas. El niño y la madre están bien. El padre, el príncipe Guillermo, asistió al parto como lo había anunciado”, citó el Palacio de Buckingham.
La misma fuente indicó que la reina Isabel II y el duque de Edimburgo (bisabuelos), el príncipe de Gales —abuelo paterno— y la duquesa de Cornualles, el príncipe Enrique —hermano de Guillermo— y las dos familias, entre ellos Carole y Michael Middleton, abuelos maternos, “fueron informados y están felices por la noticia”.
Una misiva, una proclamación firmada por médicos reales con la hora del nacimiento y su sexo, fue colocada en un caballete en el patio del palacio de Buckingham. Según una tradición respetada hace 31 años, cuando nació Guillermo.
Sin nombre
El nombre del bebé podría no ser revelado antes de varios días: los británicos tuvieron que esperar una semana antes de conocer el de Guillermo, y un mes el de Carlos.
Millones de personas festejaron frente al Palacio de Buckingham y en todo ese país el nacimiento del futuro monarca.