“Por ello, no existe riesgo alguno para los voluntarios de contagio por ébola a través de la vacuna” , subrayó la responsable del estudio, la especialista en medicina tropical Marylyn Addo.
La clínica universitaria indicó que la vacuna rVSV-ZEBOV será probada durante los próximos seis meses inicialmente en 30 voluntarios y que las primeras dosis se aplicarán en las próximas semanas.
Si todas las fases de prueba concluyen con éxito, se espera poder utilizar la vacuna aproximadamente a partir del otoño de 2015, señaló una portavoz de la UKE.
Agregó que, si para entonces la actual epidemia de ébola está controlada, el principio activo podría ser empleado en futuros brotes.
La vacuna rVSV-ZEBOV ofrece protección ante esta enfermedad con una única dosis en animales y goza del potencial de tener efecto incluso inmediatamente después de una infección con el virus del Ébola.
“En numerosos estudios no clínicos, la vacuna fue capaz de proteger a animales de laboratorio del mortal virus del Ébola” , aseguró el Centro alemán para la investigación de infecciones (DZIF) , que apoya el estudio de la UKE.
Esta semana, científicos de la Clínica Universitaria de Tubinga tienen previsto comenzar a probar también la vacuna en voluntarios en Gabón.
En Estados Unidos esta sustancia activa ya está siendo probada y Suiza empezará pronto también con el estudio en humanos, precisó la UKE.
Por su parte, el vicepresidente del Instituto Robert Koch (RKI) de virología de Berlín, Lars Schaade, afirmó que una posible propagación en Alemania del ébola está prácticamente descartada.
Lo importante, subrayó, es detectar a las personas que hayan podido tener contacto con un enfermo de ébola y examinarlas.
Sin embargo, los expertos creen que los casos sospechosos de contagio aumentarán en Alemania con el inicio de la temporada de gripe, que presenta síntomas similares a los del mortal virus, alertó el presidente de la Oficina Federal de Protección Civil alemana, Christoph Unger.
El Ejecutivo alemán, que nombró a un comisionado para el ébola, considera que el país está bien preparado ante la epidemia con sus siete unidades especiales de aislamiento.
Hasta el momento Alemania ha recibido a tres enfermos de ébola, todos extranjeros, a petición de diversas organizaciones internacionales, de los cuales uno fue dado de alta a las cinco semanas de tratamiento, otro murió a mediados del pasado mes y el tercero continúa ingresado.