Internacional

Demócratas buscan estrategia para legalización “limpia” de “soñadores”

La líder demócrata de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, discutió este miércoles con jóvenes protegidos por la Acción Diferida (Daca) una estrategia que permita una legislación "limpia" que otorgue un estatus migratorio permanente a los "soñadores".

La líder demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi durante una reunión con beneficiarios de Daca en Los Ángeles.(AFP).

La líder demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi durante una reunión con beneficiarios de Daca en Los Ángeles.(AFP).

Los beneficiados con este programa, a los que se les llama “soñadores”, han visto con preocupación las exigencias del presidente Trump de ligar cualquier tipo de beneficio migratorio de carácter permanente a su favor, que se discute en el Parlamento, con la construcción de un muro en la frontera con México.
No obstante, Pelosi y los demócratas aseguran que las posibilidades no están languideciendo y que los votos necesarios para aprobar el proyecto de ley bipartidista Dream Act 2017, presentado por las congresistas Lucille Roybal-Allard (demócrata) y Ileana Ros-Lehtinen (republicana) se pueden conseguir para fin de año.


“Todo lo que necesitamos es votar, porque los 'soñadores' ya condujeron esta cruzada y lo hicieron de una forma digna, y el presidente debe apoyar esta legislación porque los estadounidenses la están apoyando”, señaló Pelosi.
Para el congresista Jimmy Gomez, que acudió a la reunión y representa un distrito electoral con un gran número de soñadores, las observaciones de Pelosi no sólo tienen que ver con una estrategia política sino con el sentir de la opinión pública de ese bpaís, incluidos los conservadores.
elosi adelantó que cinco congresistas republicanos habían expresado apoyo a la ley que daría a los “dreamers” -soñadores- residencia condicional y luego permanente, antes de la ciudadanía.
“Necesitamos 20 más que sabemos que están ahí, nos han dicho”, indicó en una rueda de prensa en Los Ángeles, donde se reunió, junto a otros congresistas, con jóvenes temerosos de volver a las sombras.
La ley Dream -acrónimo del inglés de Development, Relief and Education for Alien Minors Act (Ley para el desarrollo, alivio y educación para menores indocumentados)- es un proyecto bipartidista que por más de una década no ha logrado ser aprobado en el Congreso.
“La pasamos en 2012 (en la Cámara baja) pero no conseguimos los 60 votos en el Senado”, recordó Pelosi.


“Sabemos que el 82 por ciento de los estadounidenses apoyan a los 'soñadores', el debate no se terminará hasta que este proyecto de ley no se haya aprobado”, sentenció Gómez.
“Definitivamente la única arma es presionar a estos congresistas (republicanos) que ya habían expresado su apoyo y se están arrepintiendo”, dijo la joven Mariana Villafaña, amparada con Daca y una de las asistentes al encuentro celebrado en la sede de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), en Los Ángeles.
Aunque Villafaña no está muy convencida que la opinión pública influya en la decisión final de los republicanos, cree la clave está en los distritos cuyos legisladores están en riesgo de perder el escaño frente a su correspondiente rival demócrata.


Pelosi señaló que para sacar adelante la iniciativa restan 20 votos, todos de la bancada republicana, algunos de los cuales representantes por California, y por ello propuso una “carrera maratónica” para asegurar el objetivo e incluso habló de poder tener una votación antes del Día de Acción de Gracias (fines de noviembre).
Por su parte, la congresista Roybal-Allard, autora del proyecto, alentó a los asistentes tras asegurar que de no aprobarse la iniciativa legislativa “el país quedaría con una marca muy fea”
La directora de CHIRLA, Angélica Salas, pidió que la comunidad inmigrante no desaproveche este momento “crucial”, esta “ventana que se abre” y que continúe la lucha por los “soñadores”.
Ante el descontento de muchos jóvenes soñadores, que rechazan su legalización a menos que incluya al total de once millones de indocumentados, Pelosi aseguró que entiende la frustración e incluso los abucheos y los gritos de “mentirosa” que sufrió hace unas semanas en San Francisco, pero recalcó que por ahora no existe el “capital político” para lograr esa meta.


“Me hubiera gustado escuchar un poco más de fuerza en la exigencia a los conservadores, pero entiendo que esto es una estrategia y no nos queda otra que seguir esta lucha. Diciembre es la meta”, dijo Villafaña.
Los demócratas han amenazado con bloquear en los próximos meses cualquier ley que el Congreso necesite aprobar para que el Gobierno siga funcionado, como es el caso del nuevo presupuesto fiscal para el que Trump necesita el apoyo de los liberales si quiere evitar un fatídico cierre.
Pelosi se mostró optimista y llegó a decir que “tiene confianza que el presidente Trump acepte las negociaciones y firme la ley”.