La detenida le enviaba desde el pasado septiembre esos mensajes a su cuenta personal de correo electrónico, hasta que el pasado 16 de febrero Macron llevó el caso ante la justicia.
Agentes de la policía judicial registraron ayer el domicilio de la supuesta agresora, confiscaron su ordenador y su teléfono móvil y la detuvieron por “reiterados mensajes malintencionados con el objetivo de perturbar la tranquilidad de otros”.
La detenida le enviaba desde el pasado septiembre esos mensajes a su cuenta personal de correo electrónico, hasta que el pasado 16 de febrero Macron llevó el caso ante la justicia.
“Se trataba de mensajes de carácter erótico, eran correos en los que le declaraba su pasión. También había fotos suyas, pero no entraremos en detalles”, declaró una fuente judicial a Midi Libre.
Los investigadores han establecido que la estudiante no presenta “ninguna peligrosidad particular” pero la justicia se vio obligada a intervenir porque “no se puede tolerar que una personalidad pública sea acosada por mensajes electrónicos, por mucho que sean de amor”.
No obstante, la joven tendrá que someterse a un examen psiquiátrico para determinar la naturaleza de su enamoramiento obsesivo.
La ley francesa establece que un acoso por vía electrónica puede suponer hasta un año de prisión y unos US$135 mil de multa.
Exclu #MidiLibre : l'étudiante amoureuse d'Emmanuel #Macron remise en liberté https://t.co/L6ZbkLMbJ7 pic.twitter.com/fKmutPPdWM
— Midi Libre (@Midilibre) February 26, 2016