Washington “no busca confrontación con Rusia”, aclaró a los integrantes de la comisión sobre las fuerzas armadas de la Cámara de Representantes.
Unos 67 mil militares estadounidenses están actualmente en el continente europeo, principalmente en Alemania (40 mil), Italia (11 mil) y Gran Bretaña (nueve mil 500). A fines de 1991 eran 285 mil.
Chollet no precisó en qué consistiría la revisión, en momentos en que el Pentágono enfrenta restricciones presupuestarias y pretende dirigir parte de sus medios hacia la región Asia-Pacífico.
El funcionario dijo que la “intervención militar ilegal de Rusia en Ucrania” cambia el paisaje de Europa en materia de seguridad, provoca inestabilidad en las fronteras de la OTAN y es un “desafío al orden mundial”.
La toma de control por parte de prorrusos de edificios de la administración ucraniana en Donetsk y Jarkov es “muy preocupante”, observó el funcionario del Pentágono, descartando que se trate de “manifestaciones espontáneas”.
Un desplazamiento de Rusia hacia el este de Ucrania “claramente sería una escalada muy seria de esta crisis”, agregó.
La presión ejercida por Moscú no se limita a Ucrania, sostuvo Chollet en un pasaje de su testimonio escrito que no fue pronunciado ante los legisladores.
“Moldavia, por ejemplo, tiene fuerzas rusas en su territorio, nominalmente de mantenimiento de la paz, pero que de hecho apoyan a la región separatista de Transnistria”, ubicada en la frontera oriental de Moldavia con Ucrania, agregó.